En la actualidad, la comida chatarra es parte del día a día para millones de personas en todo el mundo. Ya sea por falta de tiempo, comodidad, precio o simplemente antojo, muchos recurren con frecuencia a productos ultraprocesados como refrescos, papas fritas, hamburguesas, cereales azucarados o alimentos congelados.
De acuerdo con el portal Medical News Today, los efectos negativos de la comida chatarra pueden presentarse en el corto, mediano y largo plazo. Entre los riesgos se encuentran el aumento en los niveles de azúcar en sangre, inflamación crónica, deterioro en la memoria y capacidad de aprendizaje, obesidad y enfermedades del corazón.
PEORES TIPOS DE COMIDA CHATARRA
REFRESCOS, BEBIDAS AZUCARADAS Y ENERGÉTICAS
De acuerdo con el sitio Healthline, "consumir azúcar en forma líquida es mucho peor que hacerlo a través de alimentos sólidos". Refrescos, jugos con azúcar añadida y bebidas energéticas encabezan la lista de los productos más dañinos
Este tipo de bebidas se ha asociado con obesidad, resistencia a la insulina, diabetes tipo 2 y enfermedades del corazón.
ALIMENTOS FRITOS
Productos como el pollo frito, las papas a la francesa y las donas pueden ser deliciosos, pero están repletos de grasas trans, sal y calorías vacías.
La organización Precision Orthopedics & Sports Medicine advierte que este tipo de alimentos también incrementa el riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares.
CARNES PROCESADAS
El tocino, las salchichas y otras carnes procesadas contienen aditivos como nitrato y fosfato de sodio, los cuales han sido vinculados con enfermedades graves. Eat This, Not That!, señala que su consumo habitual puede aumentar el riesgo de cáncer, diabetes tipo 2 y afecciones cardíacas.
PAN PRODUCIDO EN MASA
De acuerdo con BBC Good Food, el pan de producción masiva puede representar hasta el 11 por ciento de las calorías diarias en algunas dietas, lo cual resulta preocupante si no se equilibra con alimentos más nutritivos.
CEREALES AZUCARADOS
Frecuentes en los desayunos, los cereales industrializados suelen tener altos niveles de azúcar, pocos nutrientes y granos altamente procesados. Aunque algunos están fortificados con vitaminas, su bajo contenido en fibra y proteína los convierte en una opción poco saludable.