A poco más de medio año del inicio del Mundial 2026, el Gobierno de México aseguró que el país llegará con una estrategia de seguridad totalmente coordinada, diseñada para proteger a millones de aficionados y garantizar un evento ordenado en cada una de las sedes.
La encargada de coordinar los trabajos rumbo a la Copa del Mundo, Gabriela Cuevas Barrón, explicó que la planeación comenzó hace tres años y hoy se encuentra en una fase avanzada, con la participación de autoridades federales, estatales, municipales y especialistas de la FIFA, lo que permitirá operar bajo un esquema "unificado, homologado y con perspectiva de género".
Durante la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, Cuevas detalló que la estrategia contempla protocolos compartidos para estadios, zonas públicas y espacios de celebración, así como operativos especiales en carreteras, aeropuertos y corredores logísticos donde intervendrán también las Fuerzas Armadas.
La funcionaria destacó que esta edición del Mundial marca un precedente histórico, ya que, por primera vez, habrá comités organizadores independientes en cada ciudad sede. En el caso mexicano, Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey serán anfitrionas de 13 partidos, además de cuatro encuentros de repechaje ya confirmados.
MOVILIDAD, INFRAESTRUCTURA Y CONECTIVIDAD: PRIORIDADES ANTES DEL TORNEO
El plan nacional rumbo al Mundial también incluye un paquete de obras enfocadas en mejorar la experiencia de visitantes y residentes. Entre los proyectos centrales se encuentran la ampliación de vías de acceso a las sedes y la conclusión del tren que conectará Buenavista con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), cuya entrada en operación está prevista antes del inicio del torneo.
Asimismo, Cuevas resaltó las inversiones realizadas en los tres estadios mundialistas, que han trabajado para cumplir con los estándares más exigentes de la FIFA, mejorando su conectividad, accesibilidad, sustentabilidad y servicios para los aficionados.
UN MUNDIAL CON VISIÓN DE LARGO PLAZO
Más allá de la organización del evento, el Gobierno federal considera que el Mundial 2026 será una oportunidad para dejar beneficios permanentes en las ciudades sede. La visión —explicó Cuevas— es transformar el impulso del torneo en infraestructura duradera y motivación para las nuevas generaciones de deportistas.
"México está listo para hacer historia por tercera vez como sede mundialista", afirmó, destacando que las acciones en curso buscan generar un legado que fortalezca el deporte, la movilidad y el desarrollo urbano.
Con 196 días para la inauguración y solo cuatro meses para el arranque de los partidos de repechaje, el Gobierno Federal aseguró que continuará trabajando en coordinación con FIFA para consolidar acuerdos y asegurar que la celebración "se traduzca en bienestar para la gente".




