Renovarse o morir

Este comentario viene a razón de entender los nuevos tiempos dentro de la política, no sólo en nuestro país, sino a nivel mundial

Renovarse o morir

Entender que la política, así como la vida misma, cambia conforme el paso del tiempo y se transforma para dar paso a nuevas formas y nuevas maneras de entenderla, es, o más bien, debería ser, uno de los principios fundamentales de cualquier político. Tal como hace más de dos mil años lo escribió Quinto Cicerón, en su libro "Comentarios sobre la campaña electoral", escrito para su hermano Marco Tulio Cicerón, en el que realizó una serie de recomendaciones para ser un político capaz de convencer y ganar en su campaña electoral, en uno de los comentarios aconsejaba al político tener la capacidad de adaptarse, es decir, ser flexible en su comunicación y lograr la adaptación de sus acciones y mensajes sin perder su esencia, logrando reconocer los errores, pero, más importante aún, entender las nuevas maneras en las que se debe de conducir para lograr sus objetivos.

Este comentario viene a razón de entender los nuevos tiempos dentro de la política, no sólo en nuestro país, sino a nivel mundial, donde los conocidos como partidos tradicionales, entiéndase a estos como partidos políticos que nacieron en el siglo pasado y construyeron importantes tramos de la historia moderna en las distintas regiones de nuestro planeta, en la actualidad se encuentran viviendo una de sus peores crisis, con un ascenso vertiginoso de nuevas formas de hacer política basadas en movimientos, más que en partidos, con líderes populares que encarnan a una nueva ola de liderazgos con características similares tales como la disrupción, la popularidad, el histrionismo, entre otras, en las que se debe de priorizar la concepción de un "nuevo proyecto de nación", es decir, a diferencia de los partidos tradicionales, estos nuevos movimientos que giran en torno a un líder fuerte, cuentan con la habilidad de mover emociones con la esperanza de un futuro prometedor basado en proyectos, planes e ideas que en muchos de los casos se han vuelto realidad.

En el caso de nuestro país, los partidos tradicionales en la historia reciente son el PAN, el PRI y, el PRD, partidos que hasta hace no muchos años eran prácticamente impensable imaginar la posición en la que están en la actualidad, siendo el último de estos, el PRD, el que se ha llevado la peor de las partes con la desaparición de su registro a nivel nacional. La crisis de estos partidos podemos citarla a partir del regreso al poder del PRI en 2012, donde llegaron con una amplia mayoría y lograron despertar, nuevamente, la esperanza en una nueva generación de mexicanos que creyeron en sus propuestas y levantaron amplias expectativas del nuevo Gobierno que empezaba. Sin embargo, la realidad llegó pronto, con la frialdad, la corrupción de los gobernadores de la época, la falta de resultados y la pérdida de la visión con la que llegaron, aunque también, hay que decirlo, la etapa del ascenso de las redes sociales, las cuales fueron brutales con los gobiernos de esa época, lograron que las intenciones de ese partido para mantenerse nuevamente en el poder se esfumaran en un solo sexenio. Asimismo, el PRI se encargó de acabar y denostar al PAN y sus intenciones de regresar al poder, sin darse cuenta el daño que se realizaban a ellos mismos, teniendo como resultado un par de marcas desgastadas entre sí.

Para darnos una idea de lo anterior, basta con recordar el afamado "Voto Duro" del que presumía el PRI terminó hecho trizas con una votación para diputados locales en Sonora que van de los 346 mil votos obtenidos en 2015 a los poco más de 125 mil en las elecciones de 2024, en el cual, no lograron obtener ni un solo distrito por mayoría, mismo caso de Acción Nacional, partido que en 2021 habría tenido una recuperación en bancada en el Congreso Local y hoy solamente cuentan con un diputado, cayendo en municipios de Nogales, Navojoa, entre otros, hasta el tercer o cuarto lugar en sus respectivas marcas. Algunos de los motivos de esta debacle radican en la pérdida de visión y capacidad para concretar un proyecto que les identifique en su esencia y los diferencie de las demás opciones políticas, la división interna, el acaparamiento de posiciones por los mismos de siempre y la cerrazón hacia nuevos cuadros políticos y, en la actualidad las concesiones cedidas por estos al poder, es decir, la falta de cohesión dentro de sus filas como en los casos de Yunes en el Senado y el apoyo de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados al morenista Cuauhtémoc Blanco.

Como resultado, la última encuesta publicada en medios nacionales pone a estas dos marcas por detrás del nuevo jugador en la cancha a Movimiento Ciudadano, quienes aún muy por detrás de Morena, pero han logrado desbancar a los partidos tradicionales en sus intenciones de competir contra el rival a vencer.

Para terminar, dejaría un par de frases descritas por un par de sonorenses que han dirigido ambas marcas a nivel nacional, habló de Manlio Fabio Beltrones quien en días recientes aseguró que el partido de toda su vida, el PRI, está en serio riesgo de desaparecer en 2027, y de Damian Zepeda quien ha venido afirmando que en el caso del PAN o se renuevan o se mueren. Juzgue usted mismo la tesis de ambos experimentados políticos.

borbonmanuel@gmail.com