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Se porta mal y su madre lo echa de casa: lo acusan de matarla

La fémina fue encontrada por su esposo y un testigo ayudó a dar con él presunto matricida; presenta lesiones consistentes con el ataque

Se porta mal y su madre lo echa de casa: lo acusan de matarla

El cadáver de una activista por los derechos de los animales fue encontrado en su casa por su esposo, quien reportó el hecho a la Policía; su hijo fue detenido como presunto asesino.

La víctima es Karly Cantrell; su esposo Kevin Kline y, el probable matricida es Levi Isaac Davis, de 26 años de edad; la agresión ocurrió en Middleton, Idaho.

De acuerdo con el reporte policiaco, Kevin llegó a su casa pasado el mediodía y encontró a Karly en un charco de sangre: tenía puñaladas en el abdomen y en el cuello; además, a su cuerpo le hacían falta piel y mechones de cabello.

Cuando la autoridad comenzó a investigar, descubrieron que la mujer había echado de su casa a su hijo Levi, quien se estaba portando mal.

A raíz de ello, el joven fue detenido en una casa de acogida, luego de que una persona informara que lo había visto abandonar un vehículo que coincidía con las características del sospechoso; tenía restos de sangre.

Tras su arresto, en el dormitorio del joven los agentes encontraron prendas de vestir con manchas de sangre; además, le apreciaron varias heridas, un corte profundo en el muslo y una quemadura en el brazo que no pudo explicar.

Karly Cantrel tenía otros dos hijos en edad adolescente, quienes le explicaron a los policías que la última ocasión que vieron a su madre con vida fue a las 7:35 horas, antes de marcharse a la escuela.

Luego, uno de ellos le envió un texto a su mamá, en el que le decía que había olvidado un proyecto de la escuela y que ella respondió se lo llevaría, pero eso no ocurrió ni respondió a nuevos mensajes.

Luego, un conocido de Davis le dijo a las autoridades que Levi había estado en su casa, alrededor de las 9:00 horas "con lo que parecía ser sangre en sus pantalones"; le preguntó si podía bañarse y le explicó que se había apuñalado a sí mismo; sin embargo, éste le negó el apoyo y le pidió que se marchara.

Tras su detención, Levi Davis le contó a los investigadores que había despertado a las 10:30 horas y que nadie más había agarrado su carro; luego en la declaración se añadió que no había mostrado ninguna reacción cuando se hablaba de la muerte de su madre; además, que había fingido quedarse dormido durante el interrogatorio.