Hallan anillo "alienígena" en tumba del rey egipcio Tutankamón
Arqueólogos hallaron una misteriosa joya en la antigua tumba, al lado de la cabeza del faraón; investigadores tienen su teoría
Por muchos siglos, fue la única tumba que permaneció casi intacta en el Valle de los Reyes, en Egipto, hasta que en 1922 fue descubierta por Howard Carter y abierta: en su interior guardaba formidables tesoros, como un sarcófago de oro, y hoy, la pirámide que preservaba los restos del faraón más joven de la historia, Tutankamón, sigue entregando piezas de gran importancia.
Entre esos artículos localizaron estuvo un anillo con un grabado diferente, extraño; fue encontrado a un lado de la cabeza del monarca egipcio; las inscripciones en la joya son totalmente distintas a las encontradas en la tumba.
Noticia Relacionada
Y es que la figura que tenía grabada la pieza era una criatura con figura humanoide real, que lo representaba a él, pero que los científicos y arqueólogos atribuyeron a la representación del dios Path; en tanto, en reverso se aprecia la inscripción Amon-Ra.
Pese a que los investigadores están seguros que se trata de la deidad referida, no han explicado por qué lo representaron más como un alienígena, que como a un ser humano, muy distinto a otras representaciones egipcias.
El anillo está datado en el periodo de 664 al 422 antes de Cristo (a.C.), y, de acuerdo a la mitología de Egipto, Path habitó en la Tierra hace, aproximadamente, 15 mil años, por lo que ya se tenía una imagen de la deidad entre la sociedad.
Por otra parte, para los egipcios de esa época los dioses estaban estrechamente relacionados con el cosmos, y aseguraban que los soberanos eran descendencia de esas deidades cósmicas.
Un dato que llamó la atención de los especialistas fue que el humanoide que aparece en el grabado tiene en las manos un "bastón divino", el cual tiene propiedades mágicas, pues se cree que a través de él podía controlaba desde el clima, hasta romper rocas y hacer milagros; de ahí que le atribuyan tecnología extraterrestre.
En la actualidad, la joya es exhibida en Estados Unidos, en el Museo Walters de Baltimore, luego de haber sido adquirido en 1930 al Museo de El Cairo.