Un miembro del Parlamento Europeo dijo que la nación norteamericana ya no es digna de tener ese monumento
Por: César Omar Leyva
La vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, respondió rotundamente a las solicitudes de Francia para recuperar la Estatua de la Libertad, asegurando que el monumento no será devuelto.
En sus declaraciones, destacó que "gracias a Estados Unidos, los franceses no están hablando alemán en este momento".
El conflicto surgió tras los comentarios de Raphaël Glucksmann, político francés y miembro del Parlamento Europeo, quien sugirió que Estados Unidos ya no es digno de mantener la famosa estatua que Francia regaló en 1884.
Según Glucksmann, este gesto fue una muestra de amistad entre las dos naciones, pero hoy, bajo el liderazgo actual de EE.UU., la estatua ya no representa los mismos valores que motivaron su entrega.
Al ser cuestionada sobre la solicitud de Francia, Karoline Leavitt respondió de manera tajante: "Por supuesto que no", refiriéndose a la idea de devolver el icónico monumento. Además, agregó que el político francés debería recordar que es gracias a Estados Unidos que Francia no habla alemán, en referencia a la ayuda estadounidense durante las dos Guerras Mundiales.
¿PUEDE FRANCIA RECLAMAR LA ESTATUA DE LA LIBERTAD?
La Estatua de la Libertad, inscrita en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, es propiedad de EE.UU. aunque fue un regalo de Francia para conmemorar el centenario de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos.
La estatua fue diseñada por el escultor francés Frédéric-Auguste Bartholdi y fue inaugurada el 28 de octubre de 1886, después de ser transportada en 350 piezas desde Francia.
La Casa Blanca restó importancia a las críticas de Glucksmann, subrayando que Francia debería seguir agradecida por el apoyo estadounidense durante los conflictos mundiales, reafirmando la relación histórica y estratégica entre ambas naciones.
