Antes de convertirse en una de las figuras más queridas de la televisión latinoamericana, Roberto Gómez Bolaños, mejor conocido como "Chespirito", tuvo un acercamiento profundo con el futbol. Durante su infancia y juventud, el creador del "Chavo del 8" y el "Chapulín Colorado" soñaba con brillar, pero no en los escenarios, sino en las canchas.
Nacido en 1929, Gómez Bolaños comenzó su historia con el futbol en el Colegio México, donde pronto destacó por su habilidad.
A los 13 años se unió a las categorías juveniles del Club Marte, uno de los equipos importantes de la Liga Mayor, que más tarde se transformaría en la Primera División de México.
EL DÍA QUE CHESPIRITO LE ANOTÓ A LA LEYENDA
Uno de los momentos más recordados por el propio Chespirito ocurrió a finales de los años 40. Según contó en una entrevista en 2001, logró anotarle nada menos que cinco goles a Antonio "La Tota" Carbajal, un ícono del fútbol mexicano apodado el "Cinco Copas" por haber disputado cinco mundiales.
"Van a decir que presumo mucho, pero sí. Le metí cinco goles a 'La Tota'. Desde entonces ya era muy famoso por ser un gran portero", comentó entre risas Gómez Bolaños en aquella charla televisiva.
La historia, aunque contada con emoción por Chespirito, no fue confirmada por Carbajal. El legendario portero negó haber recibido cinco goles en un partido y aseguró que desde joven se había hecho la promesa de retirarse si eso sucedía.
Sin embargo, Antonio sí reconoció haber coincidido con Gómez Bolaños en sus primeros años como futbolista. Ambos nacidos el mismo año, uno despuntó en el Club Marte, el otro en el Oviedo, y es probable que se hayan enfrentado en algún juego juvenil.
UN RECUERDO COMPARTIDO MÁS ALLÁ DEL FUTBOL
Años después, los caminos de ambos se cruzaron de nuevo, esta vez en el ámbito artístico. Carbajal fue invitado a una película protagonizada por Chespirito, y ahí recordaron con cariño sus tiempos de juventud. También compartieron su admiración mutua: el exfutbolista confesó haber seguido los programas de Chespirito junto a su familia, destacando especialmente el personaje del "Chavo del 8".
"Me recordaba a la vecindad donde vivía en la Ciudad de México", dijo Carbajal con una sonrisa.

Aunque nunca se sabrá con certeza si los cinco goles ocurrieron realmente, lo que queda claro es que Chespirito y "La Tota" compartieron una época, una cancha y una pasión. Dos leyendas en su propio terreno que, por un instante, unieron sus historias gracias al futbol.
La anécdota, entre el recuerdo y la nostalgia, demuestra que antes de las risas, hubo goles. Y que en la memoria de Roberto Gómez Bolaños, haber estado en una cancha tuvo tanto valor como estar frente a una cámara.