El productor musical y empresario Ángel del Villar, fundador de Del Records y reconocido por impulsar la carrera de figuras del regional mexicano, fue sentenciado en Estados Unidos a cuatro años de prisión por violar la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico, conocida como Ley Kingpin.
LA SENTENCIA Y LAS SANCIONES ECONÓMICAS
El fallo fue emitido por la jueza Maame Ewusi-Mensah Frimpong después de que un jurado lo declarara culpable de colaborar con Jesús "Chucho" Pérez Alvear, un promotor musical asesinado en 2024 y señalado por vínculos con cárteles mexicanos.
El 15 de agosto, Del Villar recibió una condena de 48 meses de prisión, menos de los 78 meses solicitados por la fiscalía. Además, deberá pagar una multa de 2 millones de dólares, mientras que su empresa Del Entertainment tendrá que cubrir 1.8 millones y cumplir tres años de libertad condicional.
Los abogados del empresario ya anunciaron que apelarán la decisión, con la intención de revertir la condena.
SU NEGATIVA A COOPERAR CON LAS AUTORIDADES
Antes de ser declarado culpable, Del Villar manifestó públicamente que prefería enfrentar prisión antes que colaborar como informante para el gobierno. "Yo prefiero mil veces estar sentado en una reja o en mi casa con un viper, que estar como informante para el gobierno", dijo en marzo pasado.
El productor, que en su momento trabajó con artistas como Ariel Camacho, también lanzó indirectas hacia Gerardo Ortiz, quien fungió como testigo protegido en el caso y reconoció haber participado en eventos organizados por Pérez Alvear.
EL VÍNCULO CON JESÚS "CHUCHO" PÉREZ ALVEAR
El caso se centró en los negocios entre Del Villar y Pérez Alvear, quien en 2018 fue incluido en la lista de sancionados por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por presuntamente ayudar a organizaciones criminales a lavar dinero y promover su imagen a través de la música.
En junio de 2022, Del Villar y Luca Scalisi, director financiero de Del Entertainment, fueron arrestados por mantener relaciones comerciales con personas sancionadas bajo la Ley Kingpin. Según la fiscalía, Del Villar organizó conciertos con Pérez Alvear, identificado como cercano al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
LOS CONCIERTOS EN EL CENTRO DEL JUICIO
Documentos judiciales revelaron que en abril de 2018, un artista de Del Records identificado como Gerardo Ortiz se presentó en un evento promovido por Pérez, pese a que este ya estaba sancionado. Incluso, la tarjeta de crédito personal de Del Villar fue utilizada para pagar un vuelo privado que llevó al cantante desde Van Nuys, California, a Aguascalientes, México.
Entre 2018 y 2019, Ortiz también actuó en al menos cuatro conciertos más en Baja California, Guanajuato y Chiapas, todos vinculados a Pérez Alvear. Durante el juicio, el propio Ortiz declaró haber visto a Pérez en las oficinas de Del Records y participar en eventos organizados por él.
UN CASO QUE SACUDE LA INDUSTRIA DEL REGIONAL MEXICANO
La defensa intentó argumentar que Del Villar fue manipulado por un exempleado para trabajar con Pérez, pero el jurado rechazó esta versión.
Con la sentencia firme, el caso marca un momento clave en la relación entre la música regional mexicana y las investigaciones sobre vínculos con el narcotráfico en Estados Unidos.