Hace días en el Estadio Monumental, Lionel Messi no solo regaló un doblete en la goleada 3-0 de Argentina sobre Venezuela, sino que también abrió una ventana hacia su futuro, marcada por la incertidumbre sobre su participación en el Mundial 2026.
Con la Selección Albiceleste ya clasificada a la justa que se celebrará en México, Estados Unidos y Canadá, el capitán reconoció que su batalla más difícil no se juega en la cancha, sino contra el tiempo y su propio cuerpo.
UNA DESPEDIDA CON SABOR A NOSTALGIA
Tras el silbatazo final, el astro argentino se mostró profundamente conmovido al reconocer que este podría haber sido su último partido oficial en su país. "Son muchas emociones", expresó Messi, destacando que cada encuentro en Argentina ha tenido un valor único en su carrera.
"Viví muchas cosas en esta cancha, buenas y no tan buenas, pero siempre es una alegría jugar con nuestra gente. Por muchos años tuve el cariño en Barcelona, y mi sueño era tenerlo en mi país, con mi gente. Durante mucho tiempo se hablaron muchas cosas, pero me quedo con todo lo bueno. Lo que viví es muy fuerte, hermoso", compartió con la voz entrecortada.
EL DÍA A DÍA DE UN CRACK
Más allá de los festejos, Messi fue honesto al hablar de su estado físico, asegurando que su permanencia en la élite dependerá de cómo se sienta en lo cotidiano. "Voy a ir día a día", señaló como mantra de su presente, dejando claro que ya no mide su carrera en años, sino en sensaciones.
"Estoy tratando de sentirme bien y de ser sincero conmigo mismo. Cuando yo me siento bien, disfruto. Si no estoy bien, la paso mal y prefiero no estar", confesó.
Las lesiones recientes han marcado esta prudencia: "Tuvimos una seguidilla de partidos este año. Estuve parado unos días y volví, me resentí. Ahora pude jugar tres partidos seguidos. Es día a día, sintiendo sensaciones". Por esta razón, adelantó que no viajará a Ecuador para el próximo compromiso de Argentina, privilegiando el descanso.
¿MESSI ESTARÁ EN EL MUNDIAL 2026?
El capitán albiceleste recordó sus declaraciones tras conquistar Qatar 2022: "Lo dije después del Mundial pasado: por edad, lo más lógico es que no llegue". Sin embargo, no cerró la puerta del todo. "Ya estamos ahí, estoy ilusionado, con ganas, pero es día a día, partido a partido".
Messi subrayó que la clave estará en la gestión de su físico durante una larga temporada con el Inter Miami: "Nueve meses pasan muy rápido, pero también es un montón. Nosotros terminamos la temporada a fin de año, tengo que hacer bien la pretemporada, ojalá podamos ser campeones en la MLS".
En su reflexión más dura, el argentino admitió que el retiro de la camiseta que más ama es un golpe que aún no está preparado para afrontar. "Obviamente no estoy preparado para dejar la camiseta, no es algo que me guste, que quiera, pero va pasando el tiempo, dependo mucho de eso".