Skincare en clima caluroso, hidratación intensa y FPS alto son los pilares de una piel sana y protegida en el calor extremo

El calor extremo puede provocar deshidratación, aumento en la producción de grasa, aparición de brotes de acné, manchas solares,

Skincare en clima caluroso, hidratación intensa y FPS alto son los pilares de una piel sana y protegida en el calor extremo

El verano en México no solo trae consigo días largos, cielos despejados y altas temperaturas, sino que también representa un verdadero desafío para la salud de la piel. El calor extremo puede provocar deshidratación, aumento en la producción de grasa, aparición de brotes de acné, manchas solares e incluso una mayor sensibilidad cutánea.

Ante este panorama, adaptar la rutina de cuidado facial al clima cálido no es un lujo, sino una necesidad.

¿AFECTA EL CALOR A LA PIEL?

Además de alterar el estado de ánimo y niveles de energía, el calor tiene un impacto directo en la piel. Las condiciones extremas obligan a replantear el uso de ciertos productos y a reforzar otros cuidados esenciales como la hidratación profunda y el uso riguroso de protector solar.

Es importante destacar que, antes de adoptar cualquier marca o producto, se recomienda consultar con un dermatólogo, ya que cada tipo de piel (seca, grasa, mixta o sensible) responde de forma distinta a los cambios de temperatura y a los ingredientes cosméticos.

¿QUÉ SE DEBE EVITAR EN LA RUTINA DE SKINCARE EN TIEMPO DE CALOR?

Durante los días más calurosos, hay productos y hábitos que pueden ser contraproducentes. Estos son lo que se debe evitar:

  • Cremas espesas y pesadas
  • Productos con alcohol o fragancias artificiales
  • Exfoliación excesiva
  • Saltarse el protector solar
  • Maquillaje pesado

RUTINA IDEAL DE SKINCARE EN EL CALOR

La clave está en mantener la piel limpia, hidratada y protegida. Esta es una guía básica para una rutina efectiva en climas calurosos:

  • Limpieza suave: Usar geles o espumas con ingredientes calmantes como aloe vera o centella asiática. Ayudan a eliminar el exceso de sebo y sudor sin agredir la piel.
  • Tónico equilibrante: Optar por uno sin alcohol, con activos como agua de rosas o pepino, que refrescan y minimizan poros.
  • Suero antioxidante: Con vitamina C, niacinamida o ácido ferúlico para proteger del daño solar y mantener el tono uniforme.
  • Hidratante ligera: Elegir fórmulas tipo gel o a base de agua con ácido hialurónico o glicerina, que hidratan sin sensación grasosa.
  • Protector solar FPS 50 o más: De amplio espectro, resistente al agua y al sudor, en textura fluida o mate.
  • Brumas o aguas termales: Refrescan durante el día sin alterar el maquillaje ni requerir contacto directo con las manos.

Cuidar la piel durante los meses más calurosos no implica usar muchos productos, sino los adecuados. Una rutina enfocada en la limpieza, hidratación intensa y alta protección solar es suficiente para mantener una piel saludable, fresca y radiante durante el verano.