¿Qué es mejor, correr antes o después de hacer ejercicio y por qué?

En los siguientes párrafos podrás conocer qué es mejor para el cuerpo, si correr antes o después de realizar ejercicio.

Por: Victor Alan Chávez

Cuando una persona comienza con su vida fitness, normalmente, una de las cosas que más tiene que hacer es correr. El cardio es fundamental en la gran mayoría de las rutinas de ejercicio hoy en día, por lo que uno de los debates más interesantes que hay es saber si esta acción se debe realizar antes o después de culminar el entrenamiento.

Este tipo de ejercicio es el favorito de algunos y el más odiado de otros. Para correr se necesita el temple y la resistencia necesaria para mantenerse en un mismo trote durante un tiempo considerable, hecho que ayuda de manera significativa a la reducción de peso si se relaciona con una balanceada dieta alimenticia.

En ese sentido, muchas personas creen que no existe diferencia si tomas la decisión de correr antes o después de cada entrenamiento; sin embargo, la realidad es que los resultados que estás buscando pueden modificarse para bien o para mal con esta decisión, por lo que a continuación revelaremos qué es lo mejor para el cuerpo.

CORRER ANTES Y DESPUÉS DEL EJERCICIO GENERA DISTINTOS RESULTADOS

Ambos puntos traen consigo resultados bastante positivos, aunque distintos entre sí. Lo anterior de acuerdo a las palabras de los expertos de Healthline, mismos que consideran que, mientras hacer cardio antes del entrenamiento ayuda a construir músculo, realizarlo después del mismo construye tu resistencia y la capacidad aeróbica con la que cuentas.

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Jesica Salyer, creadora de RunOnOrganic, establece que si la rutina culmina en el levantamiento de pesas, entonces la persona se enfoca más en el desarrollo muscular. Por el contrario, si el entrenamiento se finaliza con un periodo de cardio, será la resistencia aeróbica quien logre evolucionar.

¿CUÁL ES TU OBJETIVO AL CORRER?

Si tu objetivo es ganar músculo perdiendo los kilos de más con los que cuentas, los expertos recomiendan un entrenamiento balanceado en el que la opción de correr sea la primera en algunos días, mientras que la última en los restantes. Si, por ejemplo, tu rutina incluye seis días de activación a la semana, puedes optar por iniciar tres corriendo y los demás al finalizar.

Finalmente, es importante saber que el correr no es el único ejercicio que tienes en función de realizar cardio, pues junto a este también puedes hacer el salto de cuerda e, incluso, otros en los que puedes trabajar los músculos tales como las burpees.

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