Esta popular y clásica marca de refrescos es un símbolo generacional en México, pues muchos mexicanos la asocian con recuerdos familiares de antaño
Por: Marcela Islas
Jarritos, la clásica marca de refrescos en México, es un símbolo de identidad cultural que ha acompañado a generaciones. Su clásica y original botella de vidrio y su etiqueta con tres jarritos de barro evocan autenticidad y tradición, mientras su presencia en mercados, fondas y puestos de tacos refuerza su arraigo en la cultura mexicana.
Sin embargo, Jarritos ha trascendido fronteras y se ha convertido en un fenómeno global, gracias a campañas publicitarias innovadoras y actualmente con el poder de las redes sociales, ha logrado conectar con diferentes audiencias, especialmente en Estados Unidos.
JARRITOS COMO REFERENTE EN LA CULTURA POP
En el país estadounidense se ha vuelto un referente cultural de la comunidad latina, donde se han creado murales con elementos icónicos de la tradición mexicana en ciudades como Los Ángeles, Nueva York y Chicago.
Además, en mayo de 2024, la marca colaboró con Nike en una línea de calzado inspirada en sus vibrantes colores. También ha formado alianzas estratégicas con 7-Eleven para lanzar productos exclusivos, como el granizado de mandarina, y en julio de 2023 se asoció con X-Games para llegar al público de los deportes extremos.
EL FENÓMENO DE JARRITOS EN COREA DEL SUR
Recientemente, Jarritos ha llamado la atención por su peculiar estrategia de marketing en redes sociales, particularmente en su cuenta oficial de Instagram en Corea del Sur. Con más de 13 mil seguidores, la marca ha combinado elementos de la cultura mexicana con el estilo visual de los K-Dramas, lo que ha generado un gran impacto en la audiencia coreana y mexicana.
Entre las publicaciones más virales destaca la imagen de una pareja coreana compartiendo un Jarritos de cereza mientras disfrutan de un atardecer romántico, evocando las icónicas escenas de los dramas coreanos.
Otro video muestra a un gato con un sombrero de charro rodeado de hámsters bailando con sombreros de mimbre, acompañados de botellas de Jarritos y platillos mexicanos.
Esta fusión de elementos tradicionales de ambas culturas ha despertado curiosidad y entusiasmo en redes sociales, logrando que la campaña se difunda rápidamente en ambos países y creciendo a pasos agigantados la popularidad de la marca refresquera.
EL ORIGEN DE JARRITOS: UNA HISTORIA DE TRADICIÓN Y EXPANSIÓN
Jarritos es un símbolo generacional en México, pues muchas personas asocian la marca con recuerdos familiares y momentos de la infancia.
Su historia comenzó en la década de 1950 cuando Francisco “El Güero” Hill Ávalos, un químico de Guadalajara, inició la producción de bebidas carbonatadas con sabor a café. Al notar que esta opción no era popular, amplió su catálogo de sabores, dando origen a los Jarritos como se conocen hoy.
En 1965, el empresario Carlos Slim invirtió en la marca, impulsando su crecimiento en el mercado mexicano. Posteriormente, en 1973, Jarritos emprendió su expansión hacia Estados Unidos y, en 1983, se consolidó como parte del consorcio AGA a través de su subsidiaria Novamex, encargada de su embotellamiento y distribución internacional.
Gracias a su visión innovadora y su fuerte vínculo con la cultura mexicana, Jarritos continúa conquistando nuevos mercados, siendo Corea del Sur el más reciente en sumarse al fenómeno de este refresco tradicional.
