Con la llegada de las computadoras y tabletas a las aulas, cada vez más estudiantes reemplazan el lápiz por las pantallas. Sin embargo, un reciente estudio de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología advierte que abandonar la escritura manual podría tener consecuencias en la memoria y el aprendizaje.
Los investigadores comprobaron que escribir a mano activa de manera más intensa las redes cerebrales relacionadas con la retención de información y la adquisición de nuevos conocimientos, en comparación con tipear en un teclado.
EL ESTUDIO DETRÁS DEL HALLAZGO
El trabajo, publicado en la revista científica Frontiers in Psychology, fue realizado por Ruud Van der Weel y Audrey Van der Meer. En el participaron 40 estudiantes universitarios, de los cuales se analizaron finalmente 36.
Los jóvenes realizaron dos tareas: primero escribieron palabras a mano en una pantalla táctil usando un lápiz digital, y luego repitieron el ejercicio tipeando esas mismas palabras con un solo dedo en un teclado. Mientras tanto, se registraba su actividad cerebral mediante un casco con 256 electrodos capaces de detectar cambios en milisegundos.
Los resultados mostraron que la escritura manual generaba muchas más conexiones neuronales, especialmente en ondas theta y alpha, asociadas con la memoria, la atención y la capacidad de aprender.
¿POR QUÉ ESCRIBIR A MANO ES TAN EFECTIVO?
De acuerdo con los investigadores, la escritura manual exige coordinar movimientos precisos de mano y dedos, integrando información visual, motora y sensorial. Esa complejidad activa un mayor número de circuitos cerebrales, fortaleciendo el aprendizaje.
En cambio, al escribir en un teclado el movimiento es siempre el mismo: presionar una tecla. Aunque resulta más rápido, no estimula las mismas áreas cerebrales relacionadas con la memoria y el pensamiento profundo.
IMPLICACIONES PARA LA EDUCACIÓN
Los expertos advierten que reemplazar totalmente la escritura manual en las escuelas por dispositivos digitales podría afectar el desarrollo cognitivo de niños y jóvenes.
Aunque reconocen la importancia de las nuevas tecnologías, insisten en que la enseñanza de la escritura manual debe mantenerse desde edades tempranas para consolidar habilidades cognitivas clave. Además, recuerdan que tomar apuntes a mano no solo mejora la memoria, sino también la ortografía y el reconocimiento de palabras.
UN EQUILIBRIO NECESARIO
Los científicos concluyen que no se trata de elegir entre lápiz o teclado, sino de encontrar un balance. Escribir a mano es más efectivo para fijar conocimientos y comprender mejor la información, mientras que el teclado puede ser útil cuando se necesita rapidez o extensión en los textos.
En definitiva, la escritura manual sigue siendo un ejercicio mental que potencia la memoria y el aprendizaje, y su práctica no debería desaparecer de las aulas.