El concepto de "padre helicóptero" hace referencia a una crianza excesivamente protectora, en la que los padres supervisan y controlan todos los aspectos de la vida de sus hijos, a menudo con la intención de evitarles sufrimientos o errores.
Aunque este enfoque nace de un deseo de proteger, puede resultar contraproducente, limitando la autonomía y el desarrollo emocional de los niños.
Este estilo de crianza fue identificado en 1990 por los psicólogos Foster W. Cline y John J. Fay, quienes describieron a los padres helicóptero como aquellos que intervienen constantemente en la vida de sus hijos, tomando decisiones por ellos y resolviendo problemas que podrían afrontar por sí mismos.
Sin embargo, el estudio realizado por universidades de Minnesota, Carolina del Norte y Zurich en 2018 reveló que este tipo de crianza puede perjudicar la capacidad de los niños para gestionar sus emociones y comportamientos.
Los niños con padres helicópteros tienen más probabilidades de enfrentar dificultades emocionales y académicas, especialmente en la escuela.

CARACTERÍSTICAS DE LOS PADRES HELICÓPTERO
Entre las características más comunes de los padres helicóptero se incluyen vigilancia excesiva, intervención constante en conflictos, asumir responsabilidades del niño, evitar situaciones de frustración, establecer altas expectativas y generar dependencia emocional mutua.
Los expertos recomiendan que, para criar con equilibrio, es esencial encontrar un balance entre el apoyo y la independencia, permitiendo que los niños enfrenten retos y desarrollen habilidades emocionales y sociales, sin caer en la sobreprotección.
Fomentar la autonomía y la toma de decisiones desde pequeños les permitirá crecer con mayor seguridad y confianza en sí mismos.
CRIANZA CON LIBERTAD
El equilibrio entre protección y libertad es clave para una crianza saludable, permitiendo que los niños experimenten, aprendan y crezcan, guiados siempre por principios sólidos, que les brindan una base emocional y moral firme.





