El conflicto agrario de Capetamaya, uno de los más añejos de Sonora, continúa su curso, ahora en un proceso de demanda contra varios posesionarios, informó Héctor Rivera Zibirián, representante del Ejido Nuevo Centro de Población Agrícola (NCPA) Antonio Rosales, de Navojoa.
Dijo que dicho grupo, con fundamento en el Artículo 173 de la Ley Agraria, promovió un emplazamiento a juicio en el expediente 29/2023, ante el Tribunal Unitario Agrario 35, con sede en Ciudad Obregón.
Indicó que se reclama la restitución de mil 660 hectáreas dotadas por una resolución presidencial de 1960, ubicadas en los predios Las Ánimas y Capetamaya, en beneficio de 160 ejidatarios.
Anunció que el Tribunal Unitario citó a los posesionarios a una audiencia, a realizarse el próximo 10 de julio, y, en caso de no comparecer, “se podrá tener por ciertas las afirmaciones de nuestra parte”.
“Así va el proceso hasta el momento, nosotros estamos siguiendo todos los procedimientos legales y esperemos que, en su momento, el Tribunal dicte una sentencia justa y conforme a derecho”, señaló Rivera Zibirián.
Afirmó que su grupo sigue teniendo la razón jurídica y todos los elementos que avalan que son los legítimos propietarios de esos terrenos, ubicados a un costado de la carretera federal, al sur de Navojoa, y que pueden reclamar conforme a derecho.
Explicó que el conflicto de Capetamaya se debió a que dicha resolución ya fue ejecutada, en 1992, pero no fue entregada a las personas debidas, como lo establecía ese documento federal.
“Ese año, los verdaderos propietarios hicieron posesión de esas áreas durante 20 días, en una temporada triguera, y quienes estaban usando los terrenos les pidieron oportunidad de trillar, pero después, con muchas artimañas y usando la fuerza pública, sacaron a los reales dueños de los predios”, añadió.
“Esperemos que en este 2025, después de una larga lucha, haya una solución en nuestro favor”: Héctor Rivera