El uso desmedido de la IA podría traer consecuencias negativas tanto para el medio ambiente como para el desarrollo cognitivo de los usuarios
El avance de la inteligencia artificial (IA) ha transformado la manera en que las personas acceden a la información y realizan tareas cotidianas. Sin embargo, su uso desmedido podría traer consecuencias negativas tanto para el medio ambiente como para el desarrollo cognitivo de los usuarios.
Así lo advirtieron investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), quienes hicieron un llamado a la responsabilidad en su utilización. Durante su participación en el ciclo de charlas Jueves de Ciencia, los especialistas destacaron que uno de los principales riesgos del uso excesivo de la IA es su impacto ambiental.
En dicha conferencia, los especialistas, explicaron que los servidores que alimentan esta tecnología requieren grandes cantidades de energía y agua, contribuyendo al calentamiento global y al agotamiento de recursos hídricos. Además, alertaron sobre las repercusiones en el desarrollo cognitivo de los usuarios, en especial de los jóvenes, quienes podrían ver afectada su creatividad si recurren constantemente a la IA para resolver problemas.
¿QUÉ NO SE DEBE PREGUNTAR A LA IA?
Araxi Urrutia Odabachian, investigadora del Instituto de Ecología de la UNAM, enfatizó la importancia de evitar el uso de herramientas de IA para tareas triviales. Según la experta, algunas de las preguntas innecesarias que no se deberían hacer incluyen:
- Consultar información que está disponible en páginas como Wikipedia.
- Pedirle resolver problemas matemáticos sencillos.
- Preguntar sobre restricciones vehiculares diarias, como el programa "Hoy No Circula".
Urrutia Odabachian recomendó fomentar una cultura de uso responsable, evitando sustituir las búsquedas en Google por consultas a la IA y desactivando la generación automática de resúmenes en los buscadores.
Con la expansión de estas tecnologías, es importante utilizarlas de manera consciente y sustentable, priorizando el pensamiento crítico y la investigación tradicional.