Fue esposo de María y padre adoptivo de Jesús, un hombre justo y trabajador incansable, ejemplo de humildad y dedicación para muchos
Por: Ofelia Fierros
Hoy, miércoles 19 de marzo, la Iglesia Católica conmemora a San José, esposo de la Virgen María y padre adoptivo de Jesús.
San José es una de las figuras más veneradas en la Iglesia, reconocido como el fiel protector de la Sagrada Familia y un modelo de obediencia a Dios. Esta fecha es especial no solo para los fieles católicos, sino también en muchos países donde se celebra el Día del Hombre en honor a la figura paternal de San José.
Su festividad es una de las fechas más importantes del calendario cristiano, inspirando devoción y celebraciones en todo el mundo. Además de ser patrón de los trabajadores y protector de las familias, San José simboliza la humildad y la fortaleza, dejando un legado de servicio discreto y entrega total a la voluntad divina.

¿QUIÉN FUE SAN JOSÉ?
San José es una figura fundamental en la tradición cristiana. Según los Evangelios, fue un carpintero de Nazaret, un hombre justo y devoto de Dios. Su rol como esposo de María y padre adoptivo de Jesús lo convierte en un modelo de paternidad, humildad y fidelidad.
Se sabe que fue un hombre justo y un trabajador incansable, lo que lo convierte en un modelo de humildad y dedicación para muchos.
El nombre José, de origen hebreo, significa "Yavhé ha borrado", y se le reconoce por su rol protector y su misión dentro del Plan de Salvación. Su vida se caracteriza por su entrega a Dios y su cuidado hacia la Sagrada Familia, lo que le ha valido un lugar especial en el corazón de los cristianos.
El Papa Pío XII añadió, en 1955, una segunda celebración dedicada a San José el 1 de mayo, conocido como el Memorial de San José Obrero, para honrar su trabajo como carpintero y su ejemplo de esfuerzo diario. San José también es visto como un intercesor para aquellos que buscan empleo.