Motociclistas y accidentes
Por: Gerardo Armenta
El domingo anterior, en el Zócalo de la capital del país, se produjo un curioso episodio que estuvo a cargo de reconocidos personajes y políticos de Morena. Aunque parezca mentira, ninguno de ellos advirtió el arribo de la presidenta Claudia Sheinbaum a ese mítico lugar capitalino. Increíblemente permanecieron de espaldas mientras ella se dirigía a pronunciar su discurso sobre los aranceles. Cuando se dieron cuenta de su fatídica omisión, resultó demasiado tarde. La presidenta siguió de largo.
Los personajes involucrados en este curioso episodio, como quedó dicho, son actualmente políticos de primera línea. Todos muy conocidos. Juzgue usted: Ricardo Monreal, Adán Augusto López Hernández, Manuel Velasco Coello, Luisa María Alcalde, entre otros. Al parecer, en el afán de tomarse una fotografía con Andrés Manuel López Beltrán (el cada vez más famoso "Andy"), se les fue el "rollo" (no se puede pensar otra cosa) y cometieron el gran error de ignorar a la mandataria.
Como era de esperarse, este hecho fue y sigue siendo comentado a la luz de muy diversas interpretaciones, como era natural que ocurriera así. Es probable que la interpretación menos creíble pueda ser la que postula que el desaire a la presidenta fue intencional, principalmente por parte de Monreal y López Hernández, a quienes les atribuyen rencillas que acaso vendrían desde la etapa en que estuvo en juego la candidatura presidencial morenista.
Sin embargo, como bien se sabe, en México no hay político que tenga la vocación suicida que entrañaría protagonizar conscientemente un episodio como el que se comenta. Debe ser más fácil creer que los aludidos estaban dialogando con Obrador Beltrán (la "grilla" es la "grilla" bajo cualquier ambientación) y el sentido del tiempo les jugó una mala pesada, al grado de que ni cuenta se dieron del arribo de la presidenta Sheinbaum, quien siguió de largo cuando los del grupo advirtieron tardíamente el sentido de su error u omisión. Y todo acaso por estar "grillando", por decirlo de esta coloquial manera. Aunque, ni tardos ni perezosos, principalmente Monreal y López Hernández hicieron publicar mensajes de justificación o disculpa. Pero el error político ya había sido consumado. Empero, lo que llama la atención es que al parecer uno y otro son de los principales personajes políticos de estos tiempos. No en balde se desempeñan como líderes de las mayorías legislativas de Morena en la Cámara de Diputados y el Senado. La lección podría ser que también desde esas alturas políticas es posible cometer insólitos traspiés.
Mientras tanto, en Navojoa una vez más salen a relucir las graves consecuencias que suele tener los accidentes con participación de motociclistas. Por ejemplo, en un contexto de esta indeseable naturaleza se ha establecido que hasta tres jóvenes llegan a perder la vida mes tras mes. Al mismo tiempo, existe una probada relación de gravísimos perjuicios personales que suelen producirse en este ámbito de conducción tan lleno de riesgos.
Un accidente de motocicleta puede causar la pérdida de extremidades, así como parálisis, estado vegetativo, traumatismos, fracturas y, en ocasiones, hasta la muerte... Está demostrado que la mayoría de los percances en este ámbito son protagonizados por jóvenes. Tal es una certeza sabida casi desde siempre. Cabría preguntar, entonces, por qué no se ha hecho nada para controlar o evitar, hasta donde sea posible, los alcances de esa realidad, que ciertamente es ruda y peligrosa.
En términos generales, la situación que involucra a los motociclistas en el sur de la Entidad, es o tiene que ser delicada y preocupante. Por ejemplo, las estadísticas que conciernen a Navojoa son alarmantes. A este nivel han llegado los accidentes protagonizados por motociclistas. Y es cierto: a través de la educación se puede concientizar y disminuir los riesgos de esta realidad, según dijo Edmundo Valdez, comandante de Bomberos y Protección Civil.
Los hechos de que se habla siempre son preocupantes y dolorosos socialmente por los perjuicios irreversibles que suelen generar. Un accidente en motocicleta puede desencadenar verdaderos dramas existenciales por la naturaleza humana y económica de los daños que podría generar. Sin embargo, por lo visto a menudo los tripulantes de motociclistas no suelen tener en mente consideraciones como las anteriores.
La velocidad debe ser más importante, por lo menos en lo inmediato. Esta es una premisa terrible que gustan seguir los motociclistas. Es importante, sin embargo, que no se quite el dedo del renglón. Es decir que, como ha ocurrido hasta ahora en Navojoa, se haga todo lo posible por evitar los accidentes en este renglón. Se trata, en principio, de una propia seguridad personal, lo que debe ser importante, individual y socialmente hablando. Así es como debe encuadrarse esta situación.
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