¿Transformar la civilización?

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…OJALÁ

Que la gente de los grandes corporativos, negocios y dinero puedan entender el mundo y vivir la realidad de la vida más allá del dinero... Al dinero se le toma en cuenta. Se usa y se ha de respetar como herramienta y facilitador. “El dinero no es un poder para definirlo todo”. No es un instrumento de control sobre las políticas públicas y la sociedad… “Primero es la vida, la naturaleza y la gente”. Lo demás viene después. El dinero tiene una misión que cumplir, honorable y positiva: Concurre a colaborar y servir. Es el tiempo, siempre lo ha sido, de humanizarnos y tomar responsabilidad con sentido solidario, de conjunto, como pueblo humano, cada quien en lo suyo, y trascender las separaciones innecesarias; las limitaciones y demasiado corta visión de los intereses personales. En especial los de tipo negativo y egoísta… ¡Ojalá sea así! …Las oportunidades no siempre son a nuestro alcance, y cuando están no son para siempre.

…ORDEN Y ESQUEMA SOLIDARIO

Porque se va haciendo evidente que en los pueblos es una necesidad y suprema conveniencia establecer “un esquema solidario de redistribución de la riqueza y fortalecimiento de las instituciones que garanticen los derechos humanos y sociales, o la gobernabilidad y la paz entrarán en crisis”. Una buena y funcional organización que lo sea para todos, es un bien común. J. L. Antón. Es la “irrupción obligada de un orden, una socioeconomía que garantice el porvenir”. Y esto avistando solamente el plano material. En el trasfondo alienta la profunda exigencia de una visión y una postura integral, una responsabilidad de tipo universal, en la que el aspecto material es solo una parte junto a la necesidad, por ejemplo, de implantar una cultura y formación para un “desarrollo humano integral” con implicación inmediata en el “parejado”, en la familia-hogar y en el contexto cercano y conjunto, lo comunitario y nuestras comunidades de familias y de conjuntos en el espacio y compartido.

…INFECCIONES ¿SOLUCIÓN?

“…La medicina de consultorios, farmacias, clínicas, hospitales y funerarias ha fallado, se ha vuelto negocio. Dijo el científico francés Poincaré: ‘No hay enfermedades sino enfermos. No es el órgano el que está enfermo sino la persona”. “La causa última es la ignorancia en el vivir”, es no cultivar la salud, no alimentarse científicamente, por creencias o gustos distorsionados que atienden al sabor y no a la nutrición. “Los placeres de la buena mesa” es un concepto errado. Lo correcto es “los deberes de la sana mesa”. “No hay efectos sin causas. El maltrato a la naturaleza hace que esta reaccione poniendo en acción sus mecanismos defensivos. La Tierra es un ser vivo, inteligente, sabio. Si esta depredadora especie humana no atiende su llamado de atención, su jaloncito de orejas, tomará medidas cada vez más fuertes en defensa de la vida de todos los seres y de su propia vida. El humano no tiene la exclusividad ni es propietario del planeta, es un inquilino que debe obedecer las reglas de conducta y convivencia que corresponden al animal racional. Su ciencia en parte es agresiva. Hay que rescatarla para que esté al servicio de la humanidad”.  Tomando de don prestado de Don Domingo Días Porta. Seamos mejor y abundante vida en nuestra vida personal y en nuestro derredor. ¡GRACIAS!