Ahora, la inteligencia artificial se ha convertido en la nueva disrupción tecnológica, por lo que este caso es un buen ejemplo para no caer
Por: Edel Osuna
Por casi todo el siglo 20, Kodak se convirtió en referente para rollos y cámaras fotográficas, y luego con las películas para la industria cinematográfica; sin embargo, cometió un craso error que le hizo perder casi todo el terreno ganado.
Sí, así como lo lee. Y es que Kodak tuvo en sus manos lo que sería la revolución en las cámaras digitales y la dejó ir. El fatal erro fue de los altos directivos de la empresa, pues cuando el ingeniero Steve Sasson, que trabajaba en los laboratorios de investigación de la compañía, presentó su invento: la cámara digital; sin embargo, cuando los jerarcas de Kodak la vieron y comentaron con desdeño: "¿Quién va a querer hacer fotos que no se pueden ver en papel?".
Entonces, Sasson contó que la reacción de Kodak fue de curiosidad y escepticismo, "ya que no parecía un gran invento. No teníamos la sensación de haber inventado algo. La sensación era que se trataba de una visión muy aterradora de lo que podría ser posible en el futuro".
Sin embargo, la monumental falta de visión de Kodak le costaría caro, pues la cámara digital inventada en sus propios laboratorios, se aferró obstinada y tercamente a su altamente rentable negocio de la películas y rollos de fotos, sin importarle siquiera explorar verdaderamente esas innovaciones; su temor, la pérdida de jugosas ganancias anuales.
Y aunque en 1981 salieron al mercado las primeras cámaras digitales, que competían fuerte con Kodak, esta pronosticó atinadamente que la adopción masiva de lo digital tomaría tiempo, desaprovechando la gran oportunidad.
Continuó con su línea, pero fracasó; además, para ponerle "un clavo más al ataúd", se dedicó a apuntalar sus sistemas y productos anclados en la tradicional, sin visión de futuro.
En vez de ello, los directivos se diversificaron hacia los medicamentos, pues adquirieron una farmacéutica en vez de reestructurarse; para cuando Kodak quiso reaccionar, era demasiado tarde, pues la fotografía digital tiró por la borda los años dorados de una empresa de rollos y películas que no tenían cabida en la nueva era, por lo que en 2012, luego de 130 años dominando el mundo de la fotografía, se declaró en bancarrota.
LOS CUATRO PUNTOS PARA LA CAÍDA DE EL IMPERIO KODAK
De acuerdo con expertos financieros, Kodak fracasó debido a cuatro deficiencias graves e interrelacionadas para adaptarse a nuevas tecnologías disruptivas:
- Carencia de una mentalidad abierta al cambio
- Visión fragmentada entre innovaciones de sus laboratorios y necesidades comerciales
- Inercia e incapacidad para rediseñar el negocio
- Malas decisiones estratégicas de los directivos
LA IA ES LA NUEVA DISRUPCIÓN TECNOLÓGICA
Hoy, en pleno siglo 21, la era digital está en otro punto; sin embargo, en 2022 un nuevo mecanismo puso a temblar todo lo conocido: desde programas para edición de textos, fotografías y videos, hasta en los mercados bursátiles: la Inteligencia Artificial (IA), con ChatGPT a la cabeza.
Y si tienes una empresa, estudias o trabajas por tu cuenta, es importante que abras tus horizontes y posibilidades a la IA y no cometas el error de Kodak, cuyos directivos, sin visión de futuro, llevaron a la quiebra a una empresa que tenía todo para hacerse del Mercado digital.
Y es que la IA no es una amenaza, sino una herramienta para innovar y ser más ágiles y disruptivos, a fin de que las empresas la aprovechen y saquen ventaja competitiva frente a los que no le ven un uso más racional.
En el mundo actual no se trata de grandes corporativos, sino que startups o empresas nacientes que apliquen la IA creativamente a fin de disruptir en industrias enteras.
Además, los nuevos directivos deben aprender de los fracasos de otros y abrazar la innovación y las posibilidades que ofrece la IA.
