La activista sueca Greta Thunberg denunció públicamente a Israel tras ser deportada a Suecia luego de haber sido detenida junto a otros activistas en aguas internacionales.
La joven, reconocida mundialmente por su lucha contra el cambio climático, formaba parte de la tripulación del barco Madleen, integrante de la Flotilla de la Libertad, que intentaba llegar a la Franja de Gaza con ayuda humanitaria.
La nave fue interceptada por fuerzas israelíes bajo el argumento de violar el bloqueo naval vigente sobre el enclave palestino.
DECLARACIONES DE GRETA THUNBERG TRAS SER DEPORTADA
Thunberg, al llegar a París en escala rumbo a Suecia, acusó a Israel de cometer "un acto ilegal al secuestrarnos en aguas internacionales en contra de nuestra voluntad, llevándonos a Israel, reteniéndonos en el barco sin dejarnos salir".
Sin embargo, recalcó que su situación personal no es lo central en este momento. "La verdadera historia es que hay un genocidio en marcha en Gaza", afirmó contundente.
La activista insistió en que su detención no se compara con el sufrimiento de la población palestina y exigió no solo la liberación de los miembros de la tripulación que aún permanecen detenidos, sino también acciones urgentes por parte de la comunidad internacional.
"Necesitamos mucho más que el reconocimiento del Estado de Palestina. Cuando existe el riesgo de un genocidio, tenemos el deber de evitarlo", sostuvo.
Greta fue detenida junto con otros activistas, incluido el español Sergio Toribio, cuando el Madleen transportaba suministros esenciales a Gaza.
ISRAEL JUSTIFICA ESTE CASO COMO MEDIDA DE SEGURIDAD
Israel justifica el bloqueo como medida de seguridad, aunque este ha sido duramente criticado por organizaciones humanitarias que aseguran que impide la entrada de alimentos, medicinas y combustible necesarios para la subsistencia de los 2,1 millones de habitantes del enclave.
Mientras Thunberg ya fue deportada, ocho miembros del equipo, entre ellos la eurodiputada franco-palestina Rima Hassan, continúan detenidos en la prisión de Givon, en espera de una resolución judicial.
La organización Adalah, que asesora legalmente a la Flotilla, denuncia que la operación de intercepción violó el derecho internacional al producirse en aguas internacionales.
El caso ha vuelto a poner el foco sobre la situación humanitaria en Gaza y el controvertido bloqueo israelí, al tiempo que Thunberg ha ampliado su activismo hacia una postura clara en defensa del pueblo palestino y en contra de lo que define como una catástrofe humanitaria en curso.
