Han acompañado a la humanidad desde los albores del tiempo; al ser una verdadera molestia, debe atenderse su desarrollo
Por: Edel Osuna
La cucaracha, perteneciente al Blattodea, es el insecto más difícil de erradicar, ya que se reproducen vertiginosamente; además, son grandes supervivientes debido a que se adaptan a cualquier ambiente y se reproducen rápidamente.
Es decir: ni el frío, ni el calor las frena, ellas siguen reproduciéndose, multiplicándose hasta invadir desde desagües, hasta casas completas, infestándolas con una colonia sumamente numerosa.
Por otra parte, las cucarachas que viven en espacios como los registros del drenaje o alcantarillas podrían ser portadoras de múltiples enfermedades, lo que hace necesario recurrir al control de plagas o la eliminación.
Sin embargo, cuando se trata de la erradicación, el método más usado es el de la fumigación; sin embargo, de acuerdo con la Inteligencia Artificial para hacerlo de manera efectiva se requiere un enfoque combinado, por lo que aquí te dejamos algunos de los más eficientes:
- Eliminar su comida, agua y refugio: guarda los alimentos en recipientes herméticos; no dejes platos sucios ni migas en la cocina; repara fugas de agua, ya que estos insectos pueden sobrevivir mucho tiempo sin comida, pero no sin agua, y sella grietas y hendiduras donde puedan esconderse.
- Usar trampas y cebos en gel: los cebos en gel con veneno, como los que contienen fipronil o ácido bórico, son sumamente efectivos, pues las cucarachas los llevan a su colonia y contaminan a otras. Puedes hacerlo colocando trampas adhesivas en esquinas y lugares donde suelen pasar para identificar la magnitud del problema.
- Aplicar ácido bórico o tierra de diatomeas: espolvoréalo en zonas de paso, como por debajo del fregadero o detrás de la estufa. Es tóxico para ellas, pero, si se usa correctamente, seguro para humanos. También puedes deshidratar las cucarachas con tierra de diatomeas; es segura para mascotas y humanos si es de grado alimenticio.
- Insecticidas y fumigación profesional: existen aerosoles insecticidas que pueden matar al instante, pero no eliminan la infestación, por lo que si el problema es grave, una fumigación profesional con reguladores de crecimiento es la mejor opción.
- Métodos caseros, los cuales son menos efectivos, pero ayudan: bicarbonato con azúcar, pues cuando las cucarachas lo comen, mueren por acumulación de gases. Las hojas de laurel también podrían ayudar, pues su olor puede repelerlas, pero no matarlas.
Por ello, en caso de que veas cucarachas en el día, la cosa ya no es sencilla, sino que es señal de una infestación severa, por lo que si deseas realmente erradicar este flagelo, lo más recomendable es una combinación de varios métodos y, en caso de ser necesario, contactar a un exterminador.
