El popular "standupero" no tuvo que hacer nada esta vez, pero sigue generando conversación
Por: César Omar Leyva
Franco Escamilla, el reconocido comediante originario de Monterrey, volvió a ser tendencia en X (anteriormente Twitter) la tarde de este martes, después de un post que desató un nuevo debate sobre el tipo de comedia que realiza.
El usuario @ElBadiablo publicó lo siguiente: "Te vas a ganar un millón si puedes aguantar un show de stand-up comedy sin reírte o siquiera sonreír una sola vez. ¿A quién irías a ver?"
En pocas horas, la publicación se llenó de respuestas que mencionaban a diferentes comediantes que se han hecho populares en redes, pero Franco Escamilla fue uno de los más nombrados, lo que lo hizo tendencia una vez más.
El debate no solo giró en torno a él, sino también a otros comediantes, quienes, al igual que Escamilla, ofrecen shows de comedia similares. Sin embargo, parece que los usuarios tienen una crítica constante hacia él cuando se trata de cuestionar su trabajo.
Otros comediantes mencionados en los comentarios fueron los de La Cotorrisa (conducido por Ricardo Pérez y Slobotzky), así como Chumel Torres y Sofía Niño de Rivera, todos con millones de seguidores en redes sociales.
NO ES LA PRIMERA VEZ QUE FRANCO ES TENDENCIA
En redes sociales, muchos consideran que la gran cantidad de menciones se debe a la reciente polémica en la que se vio envuelto Escamilla. Esta ocurrió cuando defendió a su hija de burlas sobre su cuerpo, tras la viralización de videos y fotos de su fiesta de XV años.
En ese momento, los detractores de Escamilla revivieron una publicación anterior en la que él se burlaba de una quinceañera con sobrepeso, lo que se relacionó rápidamente con la fiesta reciente de su hija.
Como nunca antes, Franco Escamilla apareció en público para hablar, primero en un tono serio y luego visiblemente molesto, por las burlas dirigidas a su hija menor. A pesar de su enojo, los comentarios sarcásticos y las burlas continuaron en redes, con la excusa de que se trataba simplemente de comedia, un argumento con el que el comediante también se ha defendido en el pasado.
