Tiendas sexuales no son perversión

Por: Eduardo Sánchez

El 14 de febrero es una fecha que marca una tendencia inclina­da al amor y a la amistad. Un día donde tales conceptos cobran una connotación comercial.

Para ser parte de la celebración la mayoría de la gente recurre a detalles, obsequios y muestras que proyectan su aprecio por un ami­go, amiga o pareja.

Los regalos tradicionales que realizan el grueso de las personas son: flores, chocolates, monos de peluche, accesorios o también hay quienes llevan serenata.

Una alternativa más que se suma a dichas opciones con la idea de imprimir condimento a citada festividad es la que representa una tienda sex shop.

En Obregón existen 6 tien­das enfocadas al giro de juguetes sexuales. En dichos negocios se cuenta con una extensa gama de artículos para satisfacer toda cla­se de gustos y deseos. Hay desde aceites estimulantes, pastillas para otorgar energía y juguetes sadomasoquistas.

"Para el 14 de febrero las ven­tas se incrementan, la gente llega buscando trajecitos, productos que otorguen juego erótico para el masaje, lubricación y sobre todo en esta fecha se venden las cosas pequeñas como los anillos ", indicó Harumy Gastélum, encargada de una tienda.

Dijo que a los clientes se les brinda la confianza para que ad­quieran un artículo que cumpla con sus expectativas, a quienes se les recomienda consumir pro­ductos que sean patentados para que no traiga consigo un efecto que repercuta en la salud, como lo es la pastilla conocida como "el burro en primavera", un artículo que no daña el organismo y la cual tiene mucha demanda por parte de los caballeros.

"La pastilla burro en primavera no genera dolor de cabeza, no alte­ra presión arterial y su efecto dura por espacio de 14 días en los que el caballero da muy buen rendimien­to al estar estimulado", manifestó.

Hizo hincapié en que existen todavía prejuicios sobre todo en México de referirse a una tienda de sex shop como algo perverso, pero aclaró que no es así, ya que señaló que es un espacio donde se apegan a los gustos de las perso­nas, a quienes se les asesora sobre el uso de cada artículo con la fina­lidad de que puedan fabricar una vida sexual en caminada a gene­rar mayor placer y virilidad en su relación íntima.

"Pueden encontrar desde lo más sencillo como ligas, anillos o balitas con vibradoras hasta lo más extre­mo como fuetes, esposas, morda­zas entre otros ", expresó.

Los precios que manejan en una tienda sex shop varía en cada producto, pueden encontrar un artículo desde los 100 pesos hasta los 3 mil pesos, añadió.

De acuerdo a un sondeo rea­lizado, de 10 personas encuesta­das el 80 por ciento manifestó te­ner curiosidad por acudir a una tienda sex shop, pero se limitan por el que dirán, el resto simple­mente expresó no estar en sus planes.

Por su parte la encargada del negocio, expuso que debe verse una tienda sex shop como un establecimiento destinado a la venta de accesorios que propor­cionan un estímulo a las relacio­nes de las personas, cada una atendiendo sus gustos y no cata­logarse como algo morboso.

Resaltó que es importante acudir con expertos en la mate­ria para que la experiencia sea benéfica porque cada persona tiene una necesidad particular que se debe atender con profe­sionalismo para que el resultado no sea nocivo, por ello es funda­mental asistir a lugares con bue­na reputación, puntualizó.