Por: Eduardo Sánchez
Microempresarios de diferentes oficios aseguran que no han registrado sus negocios al régimen fiscal porque apenas logran sostener a sus familias con los ingresos que tienen por su trabajo y carecen de la capacidad económica de pagar impuestos o multas por retrasos en sus declaraciones.“Es un abuso lo que le hacen al microempresario, nosotros pusimos una tortillería de harina porque no alcanza, ahora lo que estamos ganando queremos que sea para nosotros”, dijo la señora Clementina Inzunza, quien tiene una tortillería al sur de la ciudad.
Por su parte, el soldador Antonio Quijada, dijo que él llegó hace diez años de Chihuahua y ha trabajado en diferentes fábricas y comercios, pero desde hace dos años que puso su taller de soldadura para ayudarse en los gastos del hogar, ya que lo que gana es insuficiente.
“Apenas y me alcanza, debo tener mi trabajo y en las tardes ayudarme con este negocio, yo no tengo carro, entonces no pago gasolina, hay gastos que yo no puedo comprobar que son deducibles porque no tengo la manera, y eso se traduce en que tengo que pagar más impuestos, eso es más gasto del que ya tengo, porque yo pago renta, agua, comida, luz, son cosas que el Gobierno no ve y que nos pega mucho a los trabajadores y a los microempresarios”, dijo.
Las cámaras empresariales, Gobierno y el mismo Servicio de Administración Tributaria (SAT) han hecho reiterados llamados para que los microempresarios se incorporen a la formalidad, alegando que esto les ayuda a que puedan acceder a programas de apoyo de los tres niveles de Gobierno, además evitar multas por trabajar de forma informal.