Los tiangueros organizados en el sector de la colonia México en Ciudad Obregón aclararon que no son ellos quienes arrojan desperdicios al canal que corre paralelo a la calle 300, sino al parecer son ciudadanos que acuden de otras partes y algunos indigentes que recogen basura y a arrojan en el lugar.
Varios dirigentes, encabezados por el presidente de la Coalición de Tiangueros del Municipio de Cajeme, Alfredo González Sandoval comentaron que constantemente la ciudadanía los critica de que, una vez que terminan con su actividad comercial en el lugar los jueves y domingos, dejan el sitio lleno de basura, cuando en realidad ellos pagan a personas para que recojan dichos desperdicios y los pongan en bolsas negras para que posteriormente, el mismo día por la tarde o muy temprano al día siguiente, pase el camión de la basura a llevárselas.
Esta es una de las cosas que se hacen con las aportaciones que los compañeros entregan a las distintas organizaciones a las que pertenecen los tiangueros de la localidad, expresaron.
Mencionaron que se han percatado también, frecuentemente les informan que incluso algunos vecinos que viven cerca del sitio donde ellos instalan sus puestos provisionales, van a y dejan basura ahí, que con el viento y la acción de los perros se desparrama, causando mal aspecto al lugar.
También se ha visto que algunos indigentes que deambulan por ahí llevan en ocasiones bolsas con desperdicios que luego arrojan al canal, que es común observar llena de suciedad, agregaron.
PIDEN PODA DE ÁRBOLES
Por otra parte, comentaron que han solicitado al Ayuntamiento de Cajeme la poda de árboles grandes, que pueden ser de riesgo tanto para ellos y sus familias, como para los ciudadanos que acuden a comprar, pero no les han hecho caso.
Expusieron que son ya dos oficios los que se han enviado en distintas fechas, pero hasta ahora no han tenido respuesta alguna.
Recordaron que hace poco, una gran rama de un árbol de álamo en la calle Coahuila y lateral 300 cayó un día que estaban laborando, pero afortunadamente no afectó a nadie, aunque estuvo a punto de caer sobro uno de los puestos instalados en ese sector.