Por: Eduardo Sánchez
De poco sirve que Germán Larrea sea declarado en Sonora por el Congreso del Estado como persona “non grata”, sino recibirá un castigo por el daño ecológico que ha causado, no solo tras el derrame en el Mar de Cortés, en el puerto de Guaymas, sino por otras acciones sumamente graves, como es el caso del Río Sonora en 2014.El presidente de la Asociación de Profesionistas y Ciudadanos de Cajeme, Teodoro Bojórquez Durán, recordó que, en el caso de los habitantes de comunidades cercanas al Río Sonora, se han visto gravemente afectados en su salud, sin que hasta la fecha el dueño de Grupo México pague las consecuencias de aquel derrame de químicos, tras la volcadura de una pipa.
Ni él, ni otros magnates han recibido castigos ni sanciones por parte de dependencias que, se supone, fueron creadas para la protección ambiental; por el contrario, “no han sido tocados ni con el pétalo de una rosa y, en cambio, ellos han causado mortalidad en los seres humanos”, dañando la salud de los habitantes de Sonora y del medio ambiente, con el uso indiscriminado de químicos, resaltando que en el Valle del Yaqui los agricultores aún utilizan fertilizantes y pesticidas prohibidos en otras partes del mundo, por el grave impacto que causan, arremetió.
En ese sentido, recordó que hace unos meses envió una iniciativa ciudadana al Congreso de la Unión, la cual le hizo llegar al diputado federal por Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Javier Lamarque Cano.
“La Asociación de Profesionistas y Ciudadanos de Cajeme se suma al grito desesperado de tanta gente que se ha visto afectada con este tipo de acciones, motivo por el cual se envió al Congreso de la Unión una propuesta en la que la Cofepris tiene que fungir el papel para la cual fue creada y debe de abocarse a la cancelación de las concesiones mineras, como también la intromisión de agroquímicos, quema de gavilla y la sanitización de los hospitales, para que de una vez por todas se eviten ese tipo de flagelos que han afectado tanto a una sociedad”.
