La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) presentó recientemente su informe sobre las perspectivas del comercio internacional en la región, el cual se publica en un momento en que el comercio mundial atraviesa transformaciones profundas, y desde una visión económica, el documento confirma una tendencia que los datos recientes ya venían sugiriendo: que la región se encuentra en una etapa en la que el comercio internacional está crecientemente condicionado por la geopolítica, la seguridad estratégica y la redefinición de cadenas productivas, consideró Luis Núñez Noriega.
El exdelegado de la Secretaría de Economía federal en Sonora dijo que la actividad comercial transfronteriza ha dejado de estar guiada principalmente por la eficiencia económica, y este proceso se manifiesta en el aumento de políticas proteccionistas, especialmente en economías avanzadas, lo cual debilita la arquitectura multilateral construida en décadas previas.
Señaló que, para América Latina, esta transición no es neutral, pues genera riesgos claros —en términos de volatilidad y menor previsibilidad regulatoria—, pero también abre espacios para reposicionar a la región en ciertos eslabones productivos. "El punto central, desde mi lectura, es que la región no puede limitarse a reaccionar; requiere una estrategia deliberada de inserción internacional", advirtió.
DESEMPEÑO RECIENTE DEL COMERCIO REGIONAL
El informe de la Cepal señala que las exportaciones de bienes crecieron alrededor de 4 por ciento en 2025, mientras que las exportaciones de servicios —especialmente los basados en conocimiento— aumentaron cerca de 7 por ciento y este dato merece destacarse, ya que, desde una perspectiva estructural, refleja un incipiente cambio de composición exportadora, donde los servicios tecnológicos y especializados ganan peso relativo frente al tradicional predominio de materias primas, afirmó.
Comentó que "aun así, debemos ser prudentes. Estos avances, aunque positivos, no implican todavía una transformación estructural consolidada. Se trata más bien de señales tempranas que muestran hacia dónde podría evolucionar la región, si se acompaña de políticas adecuadas de innovación, formación de capital humano y fomento a la inversión productiva".
Manifestó que el comercio intrarregional, por su parte, muestra una recuperación moderada, pues en términos económicos, esto es relevante porque el comercio dentro de la región tiende a contener mayor valor agregado y mayor participación de pymes, a diferencia de las exportaciones de commodities orientadas a mercados extrarregionales; por ello, su fortalecimiento no solo es una cuestión comercial, sino también de desarrollo productivo e industrial.
INTEGRACIÓN PRODUCTIVA Y BRECHAS ESTRUCTURALES
En este tema, expuso, "coincido con la Cepal en que la integración productiva regional es uno de los grandes pendientes históricos; si observamos los casos de México, Brasil o Argentina, encontramos sectores con creciente contenido tecnológico. Sin embargo, persisten amplias brechas en logística, financiamiento e innovación, que limitan la capacidad de la región para ascender en cadenas globales de valor".




