Acusan una negligencia: muere en puerta del IMSS

La tarde del domingo 18 de mayo, en pleno pico de la pandemia por Covid-19, Miguel Uzárraga Corral falleció en la puerta de la Unidad de Medicina Familiar 33 del IMSS, en Cócorit, y según su sobrina Claudia Isabel Huicosa, jamás le abrieron las puertas de la institución médica.

Por: Fabiola Navarro


Pasaban las tres de la tarde, relató, cuando su madre y hermana del fallecido recibió una llamada en la que le avisaban que Uzárraga Corral estaba delicado, sin poder respirar, por lo que pidió un taxi para que lo trasladara a la UMF. Cinco minutos más tarde llegan ella y su hija para ver la triste escena, a su familiar tendido en el suelo, con un color morado en el rostro, y pasaron cerca de 40 minutos para que una doctora y un guardia de seguridad abrieran la puerta.



"El taxista que lo dejó dijo que mi tío llegó caminando. Cuando llegamos nosotras, tuvimos que voltear el cuerpo para reconocer a mi tío que ya no respiraba. Pasaron 30 minutos, cuando salió una doctora y un guardia de seguridad sin uniforme, le tomaron los signos vitales y ya no tenía".



"La doctora dijo que probablemente a mi tío lo tiraron muerto. Le respondí que no y que había testigos, que yo ya había reportado el caso al 911. Mi indignación es por qué tienen cerradas las puertas en plena emergencia sanitaria, por qué si alguien de Cócorit o de los pueblos cercanos vamos, nos brindan esa pésima atención y debemos ir hasta Obregón a Urgencias, si no, pasa lo que a mi tío: se muere la gente".



EL IMSS DA SU VERSIÓN



El Instituto Mexicano del Seguro Social dio a conocer a través de un comunicado, que en ningún momento se le negó la atención médica al hombre de 71 años de edad, a quien las cámaras de seguridad captaron al momento de llegar, tocando en todo momento su tórax, evidentemente por un dolor en el pecho.



En el comunicado se asegura que los médicos trataron de reanimarlo, siendo imposible porque falleció por un infarto al miocardio.



Además, el IMSS Sonora reitera su compromiso para que cualquier persona que llegue de gravedad a urgencias sea derechohabiente o no, sea atendida en sus instalaciones hasta que su condición médica se estabilice.