La sequía azota a la Tribu Yaqui, y la mortandad de ganado está acabando con los ranchos en las comunidades indígenas, que registran pérdidas entre 30 y 100 cabezas.
Las 220 hectáreas de agostadero de la Etnia Yaqui están secas, los rancheros tienen que acarrear alimento y agua para evitar una mayor mortandad de animales, subrayó Lauro Baumea Mora.
"La situación es crítica, y urge que autoridades de los tres niveles del Gobierno participen para reactivar la ganadería, parte importante del circuito económico de la etnia", apuntó el productor pecuario del pueblo de Pitahaya
Resaltó que en total suman 200 ranchos en las diferentes comunidades indígenas, de los cuales 70 se ubican en Pitahaya, centro político financiero y cultural de las comunidades Las Guásimas, Baugo y parte de Oroz.
Los rancheros de la Tribu Yaqui demandan apoyos de los tres niveles de Gobierno.
"Se requiere habilitar los ranchos con forrajes, granos, alimentos balanceados, maíz forrajero y entre las propuestas de la etnia está la producción emergente de forraje emergente hidropónico en casa sombra", apuntó.
No se trata solamente de dar un apoyo, se requiere un programa que reactive la actividad de la que dependen más de mil familias en la etnia, reiteró.