Predicciones de la portada de The Economist para este 2025
Un mandala es la base para las diferentes imágenes que se presentan en la portada que podría indicar el rumbo de este nuevo ciclo
La emblemática portada de The Economist para 2025 presenta un criptograma en forma de mandala que sintetiza las tensiones y desafíos globales del año. Anualmente, esta publicación, respaldada por la dinastía Rothschild y la familia Agnelli, ofrece una perspectiva que combina análisis financiero, geopolítico y cultural, incidiendo en los procesos que moldean el mundo.
¿QUÉ SIGNIFICAN LAS IMÁGENES DE LA PORTADA DE THE ECONOMIST?
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1. Figura del mandala. En el centro destaca la imagen de Donald Trump, cuya reciente elección presidencial marca el retorno de políticas proteccionistas en Estados Unidos.
Su mandato promete un enfoque centrado en el capitalismo industrial y el real estate, respaldado por los principales financistas de su campaña. Esta visión está enmarcada por dos bloques geopolíticos en pugna.
2. El Occidente Liberal Unipolar. Representado por figuras como Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, con una expresión de preocupación, y Volodymyr Zelensky, líder ucraniano, con semblante derrotado. También se observan símbolos como:
3. Una urna de votación agrietada. Supone un reflejo la crisis democrática ante el ascenso de partidos nacionalistas en Europa.
4. Un auto eléctrico con batería baja. Indica una disminución en los esfuerzos por combatir el cambio climático.
5. Un ojo nuclear. Evocaría el peligro bélico en Ucrania y Medio Oriente.
6. El Oriente Iliberal Multipolar. Liderado por Xi Jinping, con un rostro sereno, y Vladimir Putin, con una actitud desafiante. Este bloque refleja la consolidación de una nueva era multipolar liderada por los BRICS, quienes han superado al G7 en paridad de poder adquisitivo y comienzan a abandonar el dólar como divisa internacional.
7. Un misil cerca de Trump. Podría suponer un presagio que, aunque la guerra en Ucrania podría bajar de intensidad, los conflictos en Medio Oriente, especialmente en Siria, podrían escalar.
8. Una jeringa con el número "2". Interpretada como una advertencia sobre una posible futura pandemia. El reciente contrato británico para adquirir millones de vacunas contra la gripe aviar H5N1 refuerza esta predicción.
9. Un puño rojo levantado. Símbolo de movimientos sociales como los feministas, ambientalistas y anti-racistas, vinculados al Partido Demócrata, que podrían mantener su relevancia a pesar del auge del proteccionismo y los nacionalismos.
10. Saturno, el Señor del Tiempo. Esta imagen domina la portada y este planeta, cuyos anillos desaparecerán temporalmente desde la Tierra entre marzo y noviembre de 2025, simboliza las pausas y retornos de las agendas globales.
The Economist insinúa que, al igual que los anillos de Saturno y la literatura de Jane Austen, que cumple 250 años de vigencia, las agendas liberales y progresistas no son una moda pasajera, sino un proyecto político y social de largo plazo.
¿QUÉ PREDICE THE ECONOMIST PARA 2025?
La portada de The Economist para el año 2025 ilustra un mundo en transición, que será sumamente marcado por el retorno de Trump, el ascenso de los BRICS y la persistencia de tensiones geopolíticas y sociales.
Más allá de las transformaciones políticas inmediatas, el semanario sugiere que las agendas globales seguirán influyendo, aunque bajo nuevas formas, en un futuro que promete ser tan complejo como desafiante.
