La costumbre de degustar este delicioso platillo en cualquiera de sus múltiples preparaciones representa más allá de una simple opción gastronómica
Por: Marcela Islas
En México, el 6 de enero se celebra el Día de Reyes con una tradición muy especial: partir la rosca de Reyes. Este evento reúne a familias y amigos en torno a una deliciosa rosca decorada con frutas cristalizadas, en cuyo interior se esconden pequeñas figuras del Niño Jesús.
De acuerdo a la tradición, la persona que encuentra una figura en su porción asume una responsabilidad significativa: preparar o pagar tamales para celebrar el Día de la Candelaria el 2 de febrero.
ORIGEN DEL DÍA DE LA CANDELARIA
El Día de la Candelaria se celebra el 2 de febrero y tiene raíces tanto religiosas como culturales. Esta festividad conmemora dos eventos bíblicos: la presentación de Jesús en el templo y la purificación de la Virgen María, 40 días después del nacimiento de Cristo.
En México, la tradición adquirió un matiz especial gracias a la fusión de creencias indígenas y católicas. Para los pueblos originarios, esta fecha coincidía con rituales agrícolas en honor a Tláloc, dios de la lluvia, y Chalchiuhtlicue, diosa de los lagos y ríos.
¿POR QUÉ LOS TAMALES SON EL PLATILLO PRINCIPAL EN EL DÍA DE LA CANDELARIA?
La tradición de comer tamales el Día de la Candelaria es una rica mezcla de costumbres indígenas y católicas. Sus raíces se remontan a las antiguas civilizaciones mesoamericanas, donde el maíz, ingrediente principal de los tamales, era considerado un regalo de los dioses y símbolo de fertilidad.
Con la llegada de los españoles, esta tradición se fusionó con la celebración católica de la Presentación de Jesús en el templo, dando origen a la costumbre de comer tamales el 2 de febrero.
El significado de los tamales en esta celebración es profundo, pues representa la unión entre el cielo y la tierra, lo sagrado y lo cotidiano. Además, simboliza la comunidad y la familia, ya que su elaboración suele realizarse de manera colectiva.
La tradición de comer tamales en el Día de la Candelaria es mucho más que una simple costumbre gastronómica. Es una celebración de la identidad mexicana, un homenaje a nuestras raíces y una oportunidad para fortalecer los lazos familiares y comunitarios.
Al degustar un tamal, estamos participando en una tradición milenaria que nos conecta con nuestros antepasados y con la riqueza cultural de nuestro país. Así que, si te salió el niño en la Rosca de Reyes, prepárate para compartir este delicioso platillo el próximo 2 de febrero.
