El Guante de Oro para la posición de lanzador fue para Yoanys Quiala, de los Cañeros de Los Mochis, quien tuvo un promedio de 1.000 en 18 juegos en los que vio acción, sin cometer error en 19 oportunidades a la defensiva.
En la receptoría, el mejor defensivo fue Fernando Flores, de los Mayos de Navojoa, quien, en 60 juegos, solamente cometió una pifia en 341 oportunidades, para dejar un porcentaje de 0.997 en su promedio de efectividad en defensa.
En el cuadro, los premios del Guante de Oro fueron para Brian Hernández, de Venados de Mazatlán, para la primera base, al tener un porcentaje de 0.992, cometiendo cuatro errores en 519 oportunidades.
En la tercera base, Agustín Murillo, también de los Charros de Jalisco, fue el mejor defensivo, al tener un porcentaje de 0.981, al acumular sólo tres errores en 157 ocasiones que intervino en jugadas.
Otro elemento de los Charros, Amadeo Zazueta, se llevó el Guante de Oro para el mejor parador en corto, con un promedio de 0.971, teniendo en su labor ocho pifias en 275 oportunidades.
En los jardines, dos elementos de Mayos de Navojoa se llevaron Guante de Oro, en el jardín izquierdo, el honor correspondió a Alonzo Harris, al tener cinco pecados en 149 lances, para un promedio de 0.966, mientras que Alejando González fue el mejor jardinero central, con un porcentaje de 0.975, al sumar cuatro errores es 159 oportunidades.
David Harris, de los Águilas de Mexicali, fue el mejor jardinero izquierdo, con un promedio a la defensiva de 0.992, al cometer apenas un error en 132 oportunidades.
