El drama oculto en el Tapón del Darién: la carta que estremeció a Dross

Bajo el título "Querido Dross: cruzamos el Tapón del Darién", un migrante venezolano relató la pesadilla que vivió junto a su familia

la carta que estremeció a Dross
la carta que estremeció a Dross

El popular creador de contenido Dross recibió recientemente una carta que ha conmovido a miles de personas. Bajo el título "Querido Dross: cruzamos el Tapón del Darién", un migrante venezolano relató la pesadilla que vivió junto a su familia al intentar llegar a Estados Unidos a través de una de las rutas más peligrosas del mundo.

UNA FAMILIA VENEZOLANA EN BUSCA DE ESPERANZA

El autor de la carta se presentó como Elier, un venezolano que, junto con su esposa embarazada y su hijo de cinco años, emprendió la travesía hacia Norteamérica con la esperanza de encontrar un futuro mejor. Sin embargo, lo que encontraron en el Tapón del Darién fue un escenario de violencia, crimen y dolor inimaginable.

Elier confesó que nunca dimensionó el verdadero peligro de esta selva fronteriza entre Colombia y Panamá. Al inicio, pensó que el mayor riesgo eran los animales salvajes o las condiciones naturales. Muy pronto descubrió que los grupos armados y las redes criminales son la verdadera amenaza para quienes cruzan este corredor migratorio.

UN NACIMIENTO EN MEDIO DE LA SELVA

Durante la travesía, su esposa dio a luz en condiciones extremas gracias a la ayuda de una migrante peruana que había sido enfermera en su país. La bebé fue bautizada como Milagros, un símbolo de esperanza en medio de la tragedia. Pero la alegría duró poco.

Días después, el grupo fue interceptado nuevamente por hombres armados que exigieron más dinero para dejarlos pasar. En medio de burlas y violencia, los criminales advirtieron que la recién nacida no contaba, pues la familia solo había pagado por tres personas.

LA DECISIÓN MÁS CRUEL

Entre amenazas y presiones, los hombres obligaron a los padres a elegir. Según el relato de Elier, su esposa se resistió con todas sus fuerzas, pero finalmente los criminales les arrebataron a Milagros. La envolvieron en una manta y se la llevaron. Poco después, un disparo resonó en la selva.

Elier admite que no sabe si su hija fue asesinada o vendida. Hoy, años después, mantiene la esperanza de que esté viva, quizás adoptada en algún lugar del mundo.

SECUELAS IMPOSIBLES DE BORRAR

Actualmente, Elier vive en Nueva Jersey junto a su esposa y su hijo, pero las heridas emocionales nunca cerraron. La culpa, el dolor y los recuerdos persiguen a la familia. Su hijo ya no es el mismo desde aquella experiencia, y su matrimonio quedó marcado por la tragedia.

En la carta, Elier asegura que no busca fama ni compasión, sino visibilizar lo que ocurre en esa peligrosa ruta migratoria. "No quiero que nos vean como víctimas, solo quiero que el mundo sepa lo que se esconde en esa selva", escribió con desesperación.

EL TAPÓN DEL DARIÉN, UN INFIERNO PARA LOS MIGRANTES

La historia relatada por Elier refleja lo que muchos organismos internacionales han denunciado: el Tapón del Darién se ha convertido en un corredor de horror, donde migrantes de distintos países son víctimas de extorsiones, abusos, desapariciones e incluso asesinatos.

El testimonio dirigido a Dross busca no solo contar lo que él y su familia vivieron, sino también alertar al mundo sobre el precio humano que se paga en esta peligrosa ruta hacia Estados Unidos.