"Checo", que partía octavo, perdió el control de su coche al salir de la curva 8 ante las delicadas condiciones que presenta el circuito de Hockenheim por la lluvia.
Tras hacer un trompo, el coche de Sergio Pérez golpeó contra el muro. Se despidió, así, de la carrera.
"Estoy muy decepcionado conmigo mismo, cometí un error. Una regla importante en estas condiciones es no cometer errores y estoy apenado con mi equipo. El auto acuaplaneó de la parte trasera y no lo pude controlar. Fue error de mi parte. Una pena", expresó tras su retiro.