El incidente ocurrió el domingo en la pequeña ciudad de Imotski en presencia de cientos de personas, entre ellas muchos niños, dos semanas después de que la Corte Constitucional de Croacia decidiera que las parejas del mismo sexo tenían derecho a acoger a niños.
La decisión se adoptó tras un acalorado debate en este país de 4.2 millones de habitantes, miembro de la Unión Europea desde 2013 y donde la Iglesia católica ejerce fuerte influencia.
La asociación de padres del mismo sexo Familias Arco-Iris anunció que presentará una denuncia por "incitación pública al odio y la violencia" durante el carnaval.