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Sonora

Piden lluvias a San Juan

Bañan al Santo Patrono de Pueblo Viejo en una alberca
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Bañan al Santo Patrono de Pueblo Viejo en una alberca


Cientos de fiesteros y promeseros llevaron a cabo este viernes el baño de San Juan, una de las más importantes y arraigadas tradiciones de esta región.

Ante un intenso calor, el santito fue trasladado desde la ramada de Pueblo Viejo hasta una pequeña alberca de una casa particular, frente al Río Mayo, donde en un ambiente de fe y devoción se cumplió con el ritual que recuerda el momento que San Juan bautizó a Jesucristo en el Río Jordán.

Juan Pedro Hollman López, presidente del Patronato de la Iglesia de San Juan Bautista, lamentó la falta de agua en el río, pero de cualquier forma se cumplió otra vez con una tradición de más de 200 años.

Dijo que con el baño del santo patrono de Pueblo Viejo concluyó la campaña de San Juan, tras más de 50 días de recorridos por colonias y comunidades de esta región.

“Es una costumbre que nos da cultura e identidad, hay mucha fe, bendiciones, agradecimientos, mandas, así como peticiones, sobre todo la de las lluvias, para que el agua corra otra vez por el río y haya en todas las casas y los campos agrícolas, porque la lluvia es una gran bendición”, dijo.

También expresó su satisfacción por observar en estas fiestas a bastantes niños y jóvenes, por lo que la tradición se va a mantener durante muchos años más.

La campaña de San Juan también comprendió otros rituales, como el del cruce del río, a la altura de la comunidad de Sibacobe, en la Comisaría de Tesia, donde los sanjuaneros rezaron y elevaron súplicas.

También, la entrada del santo patrono a la parroquia de San Juan Bautista, así como la danza del venado y pascola al ritmo del son de canario, acompañada por el sonido de tambores, violines y “cuetes”. 

El jueves 23 se celebró la misa y, alrededor de la ramada, se presentaron danzas y bailes y la tradicional velación.

Los organizadores agradecieron a todas las dependencias, instituciones y personas que los apoyaron en estas celebraciones y, sobre todo, a los yoremes, que con su entusiasta participación contribuyeron al éxito de la campaña de San Juan, que transcurrió en paz y orden.