Sonora

"En pandemia también hay que comer"

Abuelito que se desempeña como limpiavidrios refiere que es el único medio que tiene para llevar el sustento a su casa; prefiere algo honorable que algo indebido

En pandemia también hay que comer

Don Jesús Hernández tiene 70 años, y cada día acude al crucero de bulevar Luis Encinas y López del Castillo, en Hermosillo, para limpiar vidrios de los carros que circulan por el lugar; con los ingresos que obtiene lleva alimento a su casa, donde su esposa lo espera.

"¿Puedo limpiarle el vidrio por una moneda? Prefiero pedir permiso y que no se enojen por tirarme a los carros", dice el abuelito al ofrecer el servicio entre los vehículos por estas avenidas.

Relató que actualmente no tiene alguna pensión o apoyo gubernamental, pero asegura que es un hombre de trabajo que siempre le ha gustado ganarse el sustento diario.

Y aunque es tiempo de pandemia, señala que debe comer, por eso sale a la calle a trabajar todos los días.

En mano tiene un trapo y una botella con jabón; porta un chaleco, también su tapabocas, ya que dice que él busca acatar las medidas sanitarias para no contagiarse de covid.

Diariamente sale de su casa en su bicicleta muy temprano, y antes de las 7:00 horas ya se encuentra en el crucero, del cual se retira hasta las 15:00 horas, donde hay días buenos y malos.

"A veces sí sacamos para la comida, otros días no tanto, como todo, pero le buscamos, es preferible que robar o estar haciendo cosas indebidas, entonces debemos ganarnos la vida", puntualizó.