Por: Eduardo Sánchez
En el caso de Magdalena, donde a una recién nacida se le improvisó un casco de oxígeno, no hubo alguna omisión por parte de los médicos; donde sí la hubo fue en la recepción, señaló Bernardo Cruz Ochoa, comisionado de la Comisión Estatal de Arbitraje Médico.Manifestó que, de acuerdo con los protocolos de salud, incluso en los internacionales, se hizo todo lo necesario para preservar la vida de la recién nacida, quien nació en un automóvil al negarle la atención de parto el pasado 11 de febrero.
"En lo administrativo sí se detectó una omisión en la atención y la recepción del paciente de no haber un registro. Tenemos los dichos de la recepcionista y de la paciente; la situación se hace por escrito y se entrega a la Secretaría", comentó el comisionado.
Aclaró que en el caso donde se detectó la omisión a la Comisión Estatal de Arbitraje Médico le corresponde brindar capacitación al personal para que mejore en este rubro; sin embargo, algún despido o una sanción corresponde directamente a la Contraloría.
Cruz Ochoa señaló que se solicitó la intervención de esta comisión para analizar el caso donde, se hizo una visita al lugar donde se dieron los hechos se revisó el expediente con un abogado y un médico, además que se entrevistaron con el personal involucrado y los perjudicados.