Van 38 cadáveres encontrados
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REDACCIÓN
Luego de llevarse a cabo los procedimientos de rutina, ese mismo día la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) concluyó las labores de campo sin ningún otro resultado. Un mes después, las Guerreras Buscadoras acudieron al lugar y encontraron ocho cuerpos más.
Durante este fin de semana, el colectivo de mujeres, discípulas de las Rastreadoras de Ahome, visitaron nuevamente el mismo predio; esta vez localizaron 30 cuerpos enterrados en 20 fosas clandestinas.
Al concluir la búsqueda, ayer las Guerreras Buscadoras regresaron a sus hogares, la mayoría originarias de Guaymas y Empalme.
Fue una jornada pesada, acompañada de un calor agobiante, mencionó María Teresa Valadez Kinijara, quien dirigió al grupo, el cual se costea con recursos propios cada una de sus expediciones.
En esta ocasión recibieron apoyo por parte de la ciudadanía, pues la gente donó alimentos, equipo de trabajo y artículos de higiene, como repelentes, jabón y cloro: “Realmente se requiere de apoyo”, dijo.
Las labores de búsqueda se realizaron en conjunto con peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE); también participó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Policía del Estado.
Hay muy buena coordinación con las fuerzas de seguridad, señaló María Teresa: “También capacitamos a los policías, quienes han aprendido a trabajar con nuestro dolor al 100 por ciento y se han sensibilizado con nosotros”.
Derivado de los buenos resultados, a lo largo de toda la Entidad ha surgido la inquietud de contar con colectivos de búsqueda, así se lo han manifestado a las Guerreras Buscadoras.
Uno de esos grupos podría establecerse en Cajeme, mencionó María Teresa, quien dijo estar asombrada por la cantidad de cuerpos encontrados en tres jornadas (38), por lo cual no duda en que haya más fosas ilegales en la localidad.
Asimismo, se busca conformar y robustecer colectivos en Hermosillo, Guaymas, Empalme y Navojoa, pero para eso es necesario que los familiares de las personas desaparecidas tengan la disposición y se organicen.
“Para las familias que estamos en esto es muy importante llevar un control de denuncia. Yo le pido a las familias de los desaparecidos que hagan lo suyo”, expresó.
El primer paso es poner la denuncia de la persona desaparecida, luego se solicita el número de expediente y, posteriormente, la prueba genética o ADN: “En caso de hallar un cuerpo, así es como se liberará”, indicó.
“En ocasiones nos dicen, ‘mi hermana desapareció’, pero no mandan foto; tampoco existe denuncia o prueba de ADN; entonces, ¿a quién vamos a buscar?”.
“Una vez encontrado un cuerpo no indagamos, no queremos culpables ni justicia, ni estamos para investigar, sólo queremos encontrar a nuestros tesoros”, sostuvo María Teresa.
“Lo que buscamos es dar un poquito de paz a cada familia. Nosotros buscamos con el corazón y cargando el dolor a cuestas desde la fecha en que se llevaron a nuestros parientes”, añadió.
ENCUENTRAN CON PRECISIÓN
Las Guerreras Buscadoras son seguidoras de los medios de comunicación, pues se necesita saber dónde aparecen estos restos y así es como surge un punto de búsqueda.
“Nosotros escuchamos que aquí apareció un cráneo, pero no el cuerpo; si hay un cráneo, debe de existir un cuerpo y vamos a ir por él”, expresó Valadez Kinijara.
Pero los medios de comunicación también pueden ser armas de dos filos, sostuvo, pues en ocasiones hacen ver que existe una rivalidad entre las Guerreras Buscadoras y personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado, lo cual no es cierto, pues se trabaja en excelente coordinación.
Los elementos de la FGJE hacen su trabajo y las Guerreras Buscadoras hacen el suyo, añadió, y la verdad es que la Fiscalía no realiza trabajo de campo.
“La primera vez que pusimos la denuncia sobre la desaparición de mi hermano y lloraba, me enojaba y pataleaba. Pedía que fueran a buscarlo y ellos respondía que estaban trabajando. Ahí nos dimos cuenta que la Fiscalía hace trabajo de oficina”, expresó.
INFORMACIÓN CONFIDENCIAL
Sin embargo, según fuentes policiacas, el trabajo que realizan las Guerreras Buscadoras es tan preciso y efectivo, que sospechan que podrían estar recibiendo información confidencial sobre dónde se ubican las osamentas.
De acuerdo con algunos agentes, los mismos elementos de la corporación están sorprendidos, ya que ellos mismos no tenían conocimiento sobre esas osamentas.
La Fiscalía se ha visto opacada con esos hallazgos, pues se supone que ese trabajo lo debe realizar gente capacitada, la corporación y, específicamente, los peritos deben de trabajar en la identificación de los cuerpos, mencionaron algunos elementos.
La Fiscalía cuenta con un laboratorio de Inteligencia Científica Forense, expresaron oficiales, se debe poner en marcha toda esa tecnología para obtener la identidad, principalmente de los cadáveres encontrados.
Al concluir la jornada en Cajeme, María Teresa Valadez y el resto de mujeres regresaron a casa. La lideresa del grupo continuará con la búsqueda de su hermano, desaparecido en agosto de 2015.
“Sea como sea, vivo o muerto, yo debo encontrar a mi hermano, y cuando eso suceda, si mis compañeras me necesitan seguiré con ellas.
Siempre sin miedo, nos ha quedado claro que trabajamos con el corazón y con la bendición de Dios”, puntualizó.