Asesinan al subdirector de la policía municipal de Culiacán: ¿Quién era?
Asesinan al subdirector de la policía municipal de Culiacán, Benjamín Villarreal, en medio de ola de violencia en Sinaloa
El subdirector de la Policía Municipal de Culiacán, Benjamín Villarreal Guerrero, fue asesinado a balazos este viernes en un atentado ocurrido al mediodía en un conocido restaurante de la ciudad. El ataque, que también dejó dos víctimas más, se produjo en el restaurante-café Finca La Esperanza, ubicado en el fraccionamiento Montebello, un área residencial de la capital sinaloense.
De acuerdo con reportes de C4, el ataque se registró alrededor de las 12:50 horas, cuando la línea de emergencias 911 recibió el primer llamado, alertando sobre disparos de arma de fuego en el establecimiento. Cuando llegaron los paramédicos de Cruz Roja al lugar, confirmaron que las tres personas involucradas, dos hombres y una mujer, ya no presentaban signos vitales.
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ASESINAN A BENJAMÍN VILLARREAL
Entre las víctimas mortales se encontraba el subdirector de la policía municipal, Benjamín Villarreal, el subdirector de la Policía Municipal Culiacán, cuya muerte se suma a la creciente ola de violencia que afecta al estado. Las otras dos víctimas aún no han sido identificadas.
A la escena del crimen acudieron elementos de diversas corporaciones policiales, así como militares del Ejército Mexicano, para iniciar las investigaciones y asegurar el área. Las autoridades aún no han proporcionado detalles sobre el móvil del ataque, aunque la violencia en Sinaloa ha aumentado en los últimos meses, lo que ha generado preocupación en la comunidad.
Este asesinato se da en un contexto delicado para las fuerzas de seguridad en Sinaloa, mientras los elementos de la Policía Municipal de Culiacán se encuentran en proceso de exámenes de control y confianza, una medida implementada por el gobierno federal para garantizar la transparencia y confiabilidad de los cuerpos policiales.
La muerte de Benjamín Villarreal resalta la difícil situación que enfrentan los agentes encargados de velar por la seguridad en una región marcada por la violencia del crimen organizado. El asesinato de un alto mando policial es una muestra de los riesgos que los elementos de seguridad enfrentan a diario en el cumplimiento de su deber.
Este trágico suceso pone de manifiesto la urgente necesidad de reforzar las estrategias de seguridad en la entidad y buscar respuestas ante un panorama que sigue siendo cada vez más complejo.
