¿Víctima o victimario?

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Nadie cercano a esa comunidad escolar le ofreció su respaldo y solidaridad.

Sus compañeros estudiantes a lo más que llegaron fue a mani­festarse neutros en lo que llamaron un problema entre dos de sus compañeros.

Lo que no se dijo entonces, porque así se prefiere por respeto a la revictimización de las víctimas, es que este joven cometió un abuso sexual contra una mujer estudiante y albergada de la misma escuela.

Por personas allegadas a la víctima de abuso se logró saber que sí existe una denuncia penal y que el joven está en una situación comprometida legalmente ante la contundencia del hecho denun­ciado.

Dicen los estudiosos de las leyes que la pretensión de declararse víctima de la expulsión de la escuela y aprovechar que las autori­dades están impedidas para declarar en caso de abuso sexual, no le funcionará al joven Espinoza Rodríguez para pretender incidir un veredicto que tendrá que darse en las próximas semanas.

La aplicación tajante del reglamento en denuncias de acoso o abuso escolar en albergues estudiantiles como El Quinto debe ser una constante, para tranquilidad de estudiantes y padres de fa­milia.

Eso se le debe reconocer a la dirección de la escuela.

ROMPEN SILENCIO PADRES

Por cierto, ayer los padres de la muchacha ofendida por Samuel Sayad Espinoza Rodríguez decidieron romper el silencio debido a que el muchacho quiere pasar a ser la víctima.

“Será terrible además si esa persona logra, mediante manipulación de la opinión pública, torcer reglamentos y protocolos escolares para tomar clases y ser albergado junto a mi hija y otras mujeres que ya saben de lo que es ca­paz”, dice en un escrito el padre de la jovencita.

Dice que no habían intervenido por­que deseaban evitar que su hija viviera de nuevo esos dañinos recuerdos y te­ner que estar ofreciendo detalles a todo mundo.

Y apenas y hacen bien. Como bien está el hecho de que ya se interpuso for­malmente la denuncia y ahora sí que las leyes hablen.

GALINDO QUIERE A GANDALLAR

Todo parece indicar que José Carlos Galindo Gutiérrez, el Se­cretario de Desarrollo Urbano y Obras Públicas de Cajeme, quiere comerse todo el pastel.

Y es que según han denunciado algunos contratistas, hasta en Oomapasc tiene in­tereses y por ello hizo todo lo posible para bajar del barco al entonces Director, Rodri­go González Enríquez, quien, como ya se sabe, no se prestó a las acciones por debajo del agua, mientras que uno de los actuales directivos de la paramunicipal sí le sigue el rollo a Galindo Gutiérrez y por ello an­daban apurados para que se aprobara el crédito de 47 millones de pesos, que final­mente quedó en 33 millones.

Es más, dicen algunos constructores que pronto saldrán a relucir algunos aspectos del pasado del funciona­rio en Navojoa, en donde fue Secretario de Desarrollo Económico, y no saben por qué el alcalde Sergio Pablo Mariscal Alvarado con­sintió en que fuera uno de los integrantes de su gabinete con los antecedentes que desde hace mucho se escuchan en el gremio.

Pues otro caso más para el super super super Contralor…

CAMBIOS EN IMSS GUAYMAS

Una buena sacudida al árbol del personal del Hospital General de Zona 4 de Guaymas se vislumbra para los próximos días, pues en los recorridos del Delegado estatal del IMSS, Guillermo Noriega Esparza, ha visto cómo trabajan y en consecuencia se necesitan ajustes para que el nosocomio mejore la calidad de sus servicios.

Junto con esas medidas, se han emprendido ya gestiones para que el hospital sea sustituido porque al tener ya 60 años de opera­ción, ya rebasó su vida útil y en consecuencia se está ya en busca de un terreno para la cons­trucción de uno nuevo.

Ese nuevo edificio con­taría con capacidad para 144 camas y 7 quirófa­nos, según ha trascendi­do en la Delegación del IMSS, por lo que, en de­finitiva, Guaymas vería robustecida la atención de la salud y en conse­cuencia ya se enviarían menos pacientes a los hospitales de Hermosillo y Ciudad Obregón.