El santoral de hoy, lunes 24 de marzo, celebra a los santos cuya vida fue un ejemplo de fe, sacrificio y amor al prójimo.
Este día, la Iglesia Católica honra a Santa Catalina de Suecia, una religiosa cuya vida de fe, devoción y servicio a los demás sigue siendo una inspiración para millones. Además, en el calendario católico se honra a otros santos y beatos, como San Óscar Romero, San Severo de Catania, San Maccartemio, Beata María Karlowska, San Secúndulo de Mauritania, Beato Diego José de Cádiz y Beato Juan del Báculo.
¿QUIÉN FUE SANTA CATALINA DE SUECIA?
Hija de Santa Brígida de Suecia, patrona de Europa, Catalina fue una mujer que dedicó su vida a Dios y al cuidado de los más necesitados, en especial a las madres gestantes y a las vírgenes.
Nacida en Vadstena, Suecia, alrededor del año 1331, Catalina era la cuarta hija de Santa Brígida. Desde muy joven, su vida estuvo marcada por los valores cristianos que su madre le inculcó, además de la generosidad y el desprendimiento.
Catalina creció en un ambiente noble, pero siempre aprendió a priorizar las enseñanzas espirituales sobre las riquezas materiales. A la edad de siete años, fue enviada al convento de Risberg para su educación religiosa, lo que profundizó su amor por la oración y la meditación.
A los 13 años, su padre decidió comprometerla con el noble germánico Eggart von Kürnen. Aunque al principio no estuvo de acuerdo con el matrimonio arreglado, Catalina obedeció a su padre.
Sin embargo, tras casarse, Catalina y su esposo decidieron hacer un voto de castidad, el cual cumplieron durante su matrimonio. A los 18 años, tras la muerte de su padre, Catalina partió con su madre hacia Roma en una peregrinación, aunque poco antes de llegar, recibió la noticia de que su marido había fallecido.
Viuda y profundamente comprometida con su fe, Catalina permaneció en Roma, donde continuó el legado de su madre, Santa Brígida, imitando su vida ascética y dedicándose al cuidado de los enfermos y pobres.
Durante su tiempo en la ciudad, visitaba a los necesitados y los atendía tanto material como espiritualmente, sin distinción de lugar. Su vida fue un testimonio de generosidad, servicio y una fe inquebrantable en Dios.
¿DE QUIÉN ES PATRONA SANTA CATALINA DE SUECIA?
A pesar de no haber tenido hijos, Santa Catalina es considerada patrona de las vírgenes. Esta designación puede parecer sorprendente, considerando su matrimonio, pero se debe a su profundo deseo de consagrarse a Dios. Su vida demuestra que la pureza de corazón y la dedicación espiritual no dependen exclusivamente del estado civil.
Además, Catalina se convirtió en intercesora de las madres con embarazo de riesgo, particularmente en momentos de riesgo de aborto espontáneo, ya que muchas mujeres recurrían a ella y las acompañaba en su dolor cuando habían perdido a su hijo en el vientre.
Santa Catalina de Suecia fue canonizada en 1484 por el Papa Inocencio VIII, quien aprobó su veneración.
