Aunque la presidenta Claudia Sheinbamu retiró la iniciativa del Congreso, las protestas continúan en todo el territorio nacional. ¿Qué pretenden?
Por: Edel Osuna
Luego de un encuentro con maestros, celebrado en Palacio Nacional el 18 de marzo, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, retiró del Congreso la iniciativa de reforma a la Ley del Issste.
Y aunque a nivel nacional se había dicho que el paro magisterial en todo el país, previsto del 19 al 21 de marzo, se había suspendido, la realidad es que en la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) mantienen movilizaciones en varios estados, así como bloqueos en puntos clave de México, como carreteras, aeropuertos, oficinas de gobierno, así como avenidas principales en la Ciudad de México.
Además, se han sentido tan afectados, que las afectaciones han llegado al grado de, debido a la falta de condiciones, las clases son suspendidas en algunos estados.

También instalaron un plantón permanente en el Zócalo, provocando choques entre autoridades y comerciantes.
Por otra parte, Claudia Sheinbaum ha reiterado su llamado al diálogo, pues su administración está abierta a escuchar a los maestros, pero la CNTE refiere que no hay respuestas concretas a sus demandas y subraya que el diálogo ha sido insuficiente.
LO QUE LA CNTE EXIGE
Pese a que la iniciativa se retiró, los profesores tienen más demandas, entre ellas seguridad social, mejoras salariales, basificación de profesores interinos, plazas automáticas a egresados de la Normal, así como la eliminación de la reforma educativa de 2019.
Además, los manifestantes de la CNTE exigen que se modifique la Ley del Issste de 2007, bajo el argumento de que el gobierno no atendió sus planteamientos.

Por otra parte, priva en ellos el temor de que la reforma a la Ley del Issste no haya sido desechada por completo, sino puesta en compás de espera, a fin de no tener conflictos.
La CNTE exige, además, garantías para que, en el futuro, sus derechos laborales y su régimen de pensiones no modificados.
A raíz de las complicaciones, algunos gobernadores pidieron que la Federación atienda el conflicto, ya que las protestas afectan la vida económica y social.