Aunque parece cruel, este comportamiento es parte de la selección natural, un proceso biológico común en todas las especies
Por: Ofelia Fierros
La llegada de una nueva camada de gatitos suele ser motivo de emoción, pero también puede generar sorpresa y frustración cuando una gata decide comerse a sus crías. Este comportamiento, aunque alarmante para los humanos, es más común de lo que parece y tiene varias explicaciones en el mundo animal.
¿POR QUÉ LAS GATAS SE COMEN A SUS CRÍAS RECIÉN NACIDAS?
Una de las razones más frecuentes por las cuales una gata puede devorar a sus crías es la presencia de enfermedades o deficiencias en algunos de los gatitos. Gracias a su agudo olfato, la madre detecta que el animalito no sobrevivirá, por lo que opta por eliminarlo para evitar contagiar a los demás.
Este comportamiento también se puede presentar con crías más débiles, ya que algunas gatas priorizan a los cachorros más fuertes para asegurar su supervivencia.
Aunque este tipo de comportamiento puede parecer cruel, es una manifestación de la selección natural, un proceso biológico que predomina en todas las especies.
ESTRÉS EN EL AMBIENTE
El estrés también puede ser un factor desencadenante. En ambientes ruidosos o con cambios constantes de personas y animales alrededor, una gata puede sentirse insegura y ansiosa.
Esto puede afectarla emocionalmente, e incluso podría llevarla a rechazar o devorar a sus crías. Las madres primerizas son particularmente vulnerables a estos factores, por lo que es fundamental proporcionarles un ambiente tranquilo y adecuado para dar a luz.
FALTA DE INSTINTO MATERNO
En algunos casos, las gatas simplemente carecen del instinto materno, lo que las lleva a deshacerse de sus crías.
Este comportamiento es más común en madres primerizas o en gatas que han tenido una cesárea, ya que el proceso de parto natural activa las hormonas necesarias para el vínculo maternal. Además, el olor humano también puede confundir a la gata y hacer que no reconozca a sus cachorros como propios.
PROBLEMAS DE SALUD, COMO LA MASTITIS
La mastitis, una infección en las glándulas mamarias, es otro factor que puede llevar a una gata a rechazar a sus crías. El dolor que provoca esta condición hace que la madre no quiera amamantar a los gatitos y, en algunos casos extremos, los devora para evitar el sufrimiento.
Si sospechas que tu gata puede estar sufriendo de mastitis, es fundamental consultar a un veterinario para tratar la infección.
¿QUÉ HACER SI TU GATA SE COME A SUS CRÍAS?
Es importante mantener la calma si te enfrentas a esta situación. Este comportamiento tiene razones biológicas y naturales, aunque no sea fácil de entender para los humanos. Si observas que la gata ha perdido su instinto maternal o si el estrés está afectando su comportamiento, lo mejor es consultar a un veterinario. En algunos casos, puede ser necesario que tú mismo te encargues de cuidar a los gatitos supervivientes.
Si todos los gatitos han sido devorados, una opción para evitar que esto se repita es esterilizar a la gata. Recuerda siempre brindarle cariño y cuidados, ya que también necesita apoyo emocional para superar la situación.
Lo más recomendable siempre es acudir a un veterinario para cualquier diagnóstico o tratamiento adecuado para tu gata.
