Los habitantes de la región localizaron a las crías de los monos que han muerto y los mantienen bajo su cuidado, mientras esperan que el termómetro ceda un poco y los monos crezcan para poder llevarlos nuevamente a la selva.
La vida de estos primates no ha sido fácil, pues además los cambios climáticos, los monos enfrentan la depredación, ya que en el mercado negro las crías de mono aullador llegan a tener costos demasiado elevados.