El festival Pixelatl 2025, celebrado en Jalisco, volvió a convertirse en un punto de encuentro clave para la animación, el cómic y, cada vez con más fuerza, para el desarrollo de videojuegos en México. Durante esta edición, varios estudios compartieron sus proyectos y dejaron claro que el país no solo consume entretenimiento digital, sino que también lo crea con propuestas originales y ambiciosas que buscan trascender fronteras.
PIXELATL, UNA VENTANA PARA EL TALENTO MEXICANO
En entrevistas realizadas durante el evento, distintos equipos explicaron cómo sus proyectos se han abierto paso en un mercado dominado por grandes compañías internacionales. Aunque reconocen que aún existen limitaciones por falta de apoyo y espacios, también coincidieron en que el entusiasmo y la pasión por el desarrollo son motores suficientes para seguir avanzando.
OUTRISE STUDIOS Y EL RETO DE UN TÍTULO DE GRAN ESCALA
Uno de los ejemplos más destacados fue OUTRISE Studios, con más de 14 años de experiencia en proyectos interactivos y de marketing, que ahora apuesta por el desarrollo original. Su videojuego Donut Riders, actualmente en acceso anticipado en Steam, busca ser el primer título de carreras de mundo abierto creado en América Latina.
El proyecto, que ha reunido a 28 artistas en cinco años de trabajo, apuesta por un modelo premium sin recurrir a microtransacciones populares como los pases de batalla. Con una estética caricaturesca y personajes en forma de donas gigantes, el juego promete diversión familiar con mecánicas sencillas y un estilo visual llamativo.
DE UN PROYECTO ESTUDIANTIL A UN ESCENARIO INTERNACIONAL
Pixelatl también abrió espacio para jóvenes talentos, como el caso de Bubble Team, un grupo de seis universitarios que presentaron Colorless, un videojuego nacido como proyecto de clase.
Los creadores reconocen lo difícil que ha sido financiar sus ideas sin apoyos institucionales, por lo que han recurrido a vender pines, stickers y artesanías inspiradas en su propio juego. A pesar de estas limitaciones, su meta es buscar oportunidades fuera del país y obtener mayor visibilidad para llevar su propuesta a un público más amplio.
SEASHELL STUDIO Y LA COLABORACIÓN COMO ESTRATEGIA
Otro ejemplo inspirador es Seashell Studio, creador de Running Fable Petite Party, un título multijugador pensado para disfrutar en familia y con amigos. A lo largo de su trayectoria, el estudio ha buscado colaborar con otros equipos independientes, construyendo un modelo de trabajo en el que la unión de talentos es la clave para hacer frente a las grandes compañías.
MÉXICO Y EL FUTURO DE LA INDUSTRIA
La industria de los videojuegos ha demostrado ser más rentable que el cine y la música juntos, y México cuenta con talento para destacar en este mercado. Sin embargo, aún queda camino por recorrer para consolidar estudios nacionales y crear un ecosistema más sólido que permita a los desarrolladores competir en igualdad de condiciones con proyectos internacionales.
Pixelatl 2025 deja en claro que el país tiene creatividad, pasión y propuestas únicas, solo hace falta mayor apoyo y visibilidad para que los videojuegos hechos en México logren ocupar el lugar que merecen en la escena global.