En el lugar de la explosión se localizaron 68 restos, de los cuales 15 fueron reconocidos y entregados de forma inmediata y 53 más se enviaron al Servicio Médico Forense (Semefo) de Pachuca el 22 de enero, con la finalidad de realizar pruebas de identificación.
A los cuerpos entregados se les realizaron pruebas de ADN para ser identificados y ahora serán entregados a sus familiares.
La explosión en Tlahuelilpan dejó un saldo de 135 personas fallecidas.