El es un niño mexicano de apenas 8 años de edad, el cual tiene una gran peculiaridad, a su corta edad ya es una surfista experimentado que pertenece a la Federación Mexicana del Surf y se prepara para las competencias y llegado el momento representará con orgullo a Oaxaca.
Hijo de padre hawaiano y madre oaxaqueña, el pequeño vive en Puerto Escondido y desde que tenía dos años empezó su pasión por el mar gracias a la influencia de su abuelo paterno.
Cobijado por los consejos de su padre, quien en su juventud también fue un surfista profesional, Kalama, lleva una disciplina muy estricta para combinar su pasión por el surf así como sus obligaciones con la educación.
Su día empieza muy temprano, a las 07:00 horas inician sus prácticas montando olas para regresar a las 09:00 a cumplir con su educación con las clases en línea, posteriormente, cerca de mediodía retorna al mar
"Apoyamos sus deseos de ser surfista porque le vemos un gran talento natural para dominar el mar, no cualquiera y aunque es una disciplina no lo obligamos a ir, él solito sabe que el entrenamiento comienza por la mañana antes de sus clases", comentó Jarred Elika, padre de Kalama.
La madre del pequeño, es maestra de profesión y también apoya el talento de Kalama haciendo equipo con sus hijos y esposo, incluso en ocasiones los acompaña a sus prácticas pero principalmente se encarga de la alimentación del menor y que vaya al corriente en sus obligaciones.
"Somos un equipo como familia, cada uno tiene un rol importante en este proyecto. Claro que no todo es entrenamiento, Kalama es como cualquier niño que va a clases, juega, va a la iglesia, pero su pasión es el mar y allí estamos con él. Claro que le tengo miedo a este deporte porque él está chiquito, pero también he visto su talento y con la guía de su padre está seguro y va a llegar lejos", explicó Zahazy, madre de Kalama.