Audiencia por gasoducto

Por: Eduardo Sánchez

Este día se presume la realización de una audiencia que debió celebrarse el 12 de marzo pasado, pero que por no haberse notificado a la perito Enriqueta Lerma Rodríguez, en Chiapas, se pospuso.

Tanto los yaquis de Loma de Bácum como los de la empresa Gasoducto Agua Prieta, así como Tomás Rojo, Juan Silverio Jaime León y otros de los llamados “torocoyoris” comparecerán para presentar sus testimonios.

Según cuentan, desde el gobierno estatal han estado presionando a la Juez, Rosario Alcántar Trujillo, para que cambie de parecer, pero todo indica que ella se mantiene firme en impedir que el ga­soducto llegue a destruir el ancestral territorio y patrimonio yaqui.

Mientras, en la ciudad se pueden contar con los dedos de las ma­nos las empresas o domicilios interesados en recibir el suministro de gas natural por la vía de un ducto.

¿Temor a las explosiones? En parte. Pero también desconoci­miento real de lo que ha pasado con esta infraestructura.

A propósito de combusti­bles, los viajeros de Semana Santa se reportan para señalar que la gasolina se ubica por el lado de Caborca y San Luis Río Colorado en niveles de 15 pesos.

¿Cómo es posible que en esas zonas sí se haya podido bajar el precio de las gasoli­nas mientras en el resto del Estado no bajan de 20 pesos?

Además, prácticamente todas las casetas de cobro están “libe­radas” por grupos que buscan el libre tránsito, salvo en la de San Luis Río Colorado, en donde sí debe pagarse el peaje.

Son problemas que aparentemente no tienen importancia, pero los gobiernos federal y estatal no responden con la celeridad que los ciudadanos desean y por ello a la hora de los discursos se llevan sus abucheos de padre y señor mío.

Pues será el sereno, me acusarán de estar golpeando o de que no ando en el mismo barco, pero las horas de la Semana Santa le dije­ron a las autoridades que no es cierto aquello de que sus estadísti­cas de violencia están a la baja.

Acribillados, secuestrados, robos al por mayor y un largo etcétera dibujan el panorama violento del Valle del Yaqui que las autoridades se niegan a reconocer.

Se supone que Cajeme está “blindado” con un gran número de militares, agentes federales, estatales y municipales dispues­tos a partirse el lomo por los ciudadanos, pero tal parece que no es así.

Al contrario, hay quienes dicen que desde adentro se están esca­pando los “pitazos” para saber en qué y en dónde están trabajando las corporaciones y esa “mafia” al interior de los cuerpos policiacos es a la que más temen los agentes y por ello muchos de los buenos dudan en actuar para evitar que los acusen con los narcos y se les vengan encima.

Y todo eso, lo “ignoran” los altos mandos. Sí chuy.

Lo que se requiere ahora es que el alcalde Sergio Pablo Mariscal Alvarado y todo su equipo se suban al mismo barco del pueblo, que es donde se sienten los golpes de la marea alta.

Ernesto de Lucas Hopkins, el actual Gerente del PRI en Sonora, no fue muy lejos por la respuesta a su reclamo de ¿dónde andan los delegados de las dependencias federales?:

Por lo pronto, de la Delegación de Sedatu ya le explicaron que sí hay delegados. Lo que pasa es que él no se había dado cuenta, pero ya lo van a orientar.

En principio, dicen que en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano en la entidad, andan volando algo así como 42.6 mi­llones de pesos cuyo gasto el anterior delegado, por cierto miembro del PRI, no comprobó.

Y, según nuestras antenitas, de otras delegaciones saldrán bombas de ese mismo calibre. Como, por ejemplo, la Conafor, en donde aparentemente se fueron a campañas políticas varios milloncitos cuando un señor de Villa Juárez, hoy en Cecop, las mandaba a cantar ahí.

Así que si lo que De Lucas Hopkins quería era despertar al monstruo, pues lo ha logrado.